El historiador, José Navarro Talegón, sostiene en un artículo publicado en la revista "Toro cofrade" que el de las clarisas es el más antiguo de los asentamientos de órdenes mendicantes que se establecieron en Toro y, al parecer, las religiosas que fundaron el monasterio procedían de otro de la misma advocación de Salamanca, surgido por el año 1238. Las discrepancias sobre el origen del convento surgieron, según Navarro Talegón, al precisar la identidad de la promotora y la fecha de la fundación, fijada en 1255 en el texto epigráfico que ilustraba el antiguo sepulcro de la infanta doña Berenguela, hija primogénita de Alfonso X El Sabio y de la reina Violante de Aragón, así como en el ataúd de madera al que trasladaron sus restos al convento de Toro en 1772 y en el escudo del siglo XVII que campea a la entrada de la portería.

En un ponencia presentada durante un congreso internacional sobre las clarisas en España y Portugal celebrado en 1992, el historiador toresano expuso cómo se compatibilizaba la fecha fundacional de 1255 con el papel desempeñado por Doña Berenguela, la primogénita de Alfonso X y que no fue el de fundadora sino el de restauradora del convento.