"Perversidad. Mujeres fatales en el arte moderno (1880-1950)" es el título de una exposición temporal inaugurada recientemente en el Museo Carmen Thyssen de Málaga, que plasma la evolución de la identidad femenina a través de imágenes de conocidos artistas y para la que se han seleccionado tres obras de la pintora toresana Delhy Tejero. Su fascinante personalidad, su indiscutible talento, su valentía o su capacidad para adaptarse a los cambios o al arte de vanguardia en una época en la que las mujeres seguían relegadas a un segundo plano, marcaron la vida y la trayectoria profesional de Delhy Tejero, autora de tres de las 70 obras seleccionadas por la comisaria de la exposición y directora artística del Museo Carmen Thyssen de Málaga, Lourdes Moreno.

Los sobrinos de la pintora toresana y custodios de su valioso y extenso legado artístico, Javier y María Dolores Vila, participaron en la inauguración de la exposición en la que, hasta el 8 de septiembre, el público podrá admirar una cuidada selección de obras que ponen rostro a otras tantas mujeres, anónimas o con nombre propio, reales o ficticias, mundanas o idealizadas, que muestran la riqueza de los diferentes puntos de vista sobre lo femenino en el arte de vanguardia.

"Mussia" es una de las obras más conocidas de Delhy Tejero y, desde el Museo Provincial de Zamora ha viajado hasta Málaga para participar en esta exposición, porque se adapta a la perfección a la esencia de la muestra, ya que la artista plasmó sobre el lienzo la imagen de una mujer idealizada, valiente y segura de sí misma. Las formas geométricas o los vistosos colores utilizados por la artista toresana en la creación de esta obra contribuyen a aportar una imagen moderna a la mujer que recrea sobre la tela, una mujer de vanguardia. Las otras dos obras seleccionadas para la exposición del Museo Carmen Thyssen son un autorretrato de Delhy Tejero y una ilustración de La Venus Bolchevique que se publicó en el año 1932, en la revista "Crónica".

La muestra "Perversidad. Mujeres fatales en el arte moderno (1880-1950), según la información divulgada por el Museo Carmen Thyssen de Málaga, recorre más de medio siglo de imágenes protagonizadas por mujeres, en un período que discurre entre finales del XIX y mediados del XX, en el que su representación en el arte mostrará, como reflejo de las realidades sociales contemporáneas, un cambio de paradigma, ya que el punto de vista exclusivamente "masculino y misógino" se enfrentará al planteado por la mirada femenina sobre su propia identidad.

A través de las 70 obras seleccionadas para la exposición temporal, el espectador podrá admirar, desde una imagen de la actriz Sarah Bernhardt hasta obras de pintoras de la Generación del 27 que reivindicaron una nueva forma de mirar y de ser vistas, tales como Maruja Mallo y Delhy Tejero, pasando por musas de artistas como Gala Dalí o Kiki de Montparnasse, majas españolas, damas burguesas, modelos inventadas de inquietantes miradas, referentes de una nueva moda en femenino, estudiantes universitarias o unas terrenales venus de los bajos fondos de la sociedad moderna. La muestra, tal y como resalta el Museo Carmen Thyssen, propone desde una mirada ajena a la propia un relato coral que reúne múltiples visiones de la mujer y lo femenino desde finales del XIX hasta mediados del XX. El relato se divide en tres secciones que abordan, respectivamente, la revisión del mito de la "mujer fatal", la representación de las mujeres de la noche y de la vida moderna y a una nueva mujer, activa, creativa e independiente.

La elección de tres de sus obras para esta exposición supone un nuevo y merecido reconocimiento para la artista toresana que, en los últimos meses y con motivo de la conmemoración el pasado año del 50 aniversario de su muerte, ha resurgido en parte del ostracismo al que la había relegado parte de la crítica. Su ciudad natal también ha saldado una cuenta pendiente con Delhy Tejero a la que, el pasado mes de febrero en una sesión plenaria solemne, distinguió con el título de Hija Predilecta de Toro.