Azucarera ha reiterado en la Mesa Nacional del Azúcar su firme apuesta por la continuidad del sector remolachero y de sus cuatro fábricas, una de ellas implantada en Toro. En el marco de esta reunión, la compañía también ha defendido su propuesta de aplicar, a partir de la próxima campaña, un nuevo modelo adaptado a las actuales condiciones del mercado y a la situación de crisis del sector provocada por la caída de los precios del azúcar, tras la desaparición del sistema de cuotas.

Por otra parte, Azucarera ha asegurado que las nuevas condiciones del mercado representan una circunstancia contemplada en una de las cláusulas del Acuerdo Marco Interprofesional firmado en 2015 y que el nuevo modelo que aplicará no se basa en bajar el precio de la remolacha sino en adaptarlo a un nuevo escenario. Del mismo modo, resaltó que su propuesta es necesaria "para salvar el sector" y para garantizar la sostenibilidad de las cuatro fábricas de la compañía.