La ciudad de Toro se volcó ayer con la festividad del Cristo del Amparo, cuya celebración tuvo lugar en la iglesia de la Trinidad con el oficio de una eucaristía y la tradicional procesión por las rúas adyacentes al templo religioso. Decenas de personas, pertenecientes a la congregación homónima al festejo y devotos católicos, se unieron al acto litúrgico.

La jornada comenzó con la bienvenida por parte de la Cofradía del Cristo del Amparo a su homóloga zamorana, más conocida popularmente como las Capas Pardas. Los abades de la cofradía local prepararon un refresco para la delegación, conformada por junta directiva y cargadores, de la Hermandad Penitencial del Santísimo Cristo del Amparo durante la mañana de ayer. El presidente de la congregación local, José Espinosa, agasajó a su homólogo zamorano, Antonio Martín, con un tradicional bizcochón, una cazuela de barro donde se cocinan las sopas de ajo semanasanteras y una placa conmemorativa de la visita. Por su parte, Martín devolvió el detalle regalando a la cofradía toresana un pañuelo negro bordado con el motivo de la festividad.

Esta relación se remonta a finales de 2016, cuando la hermandad local invitó a las Capas Pardas a participar en el traslado de la imagen del Cristo del Amparo desde la Colegiata, donde había estado expuesto con motivo de Las Edades del Hombre, hasta su sede en la iglesia de la Trinidad. Desde aquel evento, la relación entre ambas cofradías se estrechó y nació el deseo de portar la talla en muchos hermanos de la congregación zamorana. Un deseo que se ha visto cumplido durante esta visita, en la que algunos de los cargadores oficiales de las Capas Pardas pudieron llevar sobre sus hombros la imagen del Cristo del Amparo de Toro durante la procesión de la tarde.

Procesión que se desarrolló tras la celebración de la eucaristía en la iglesia de la Trinidad. La Cofradía del Cristo del Amparo portó su imagen por la calle Reyes Católicos, Cañizo, Santo Domingo, Cañuelo, San Pedro, Horno de San Salvador, puerta de Pozoantiguo y Tablaredonda hasta retornar al templo.