Tras más de diez años de reuniones, asambleas, proposiciones, votaciones (hasta cuatro), charlas de expertos y discusiones acaloradas el canal de San José aprobó ayer en reunión extraordinaria la modernización de la comunidad, para implementar el riego de aspersión y despedirse del riego a manta. Con 900 votos a favor y 700 en contra (los votos son por número de hectáreas, no por propietarios únicos -1.400-) la comunidad del San José decide dar un salto hacía adelante y comenzar con los preparativos para proceder a modernizar las instalaciones del canal. Un proceso que "no será de hoy para mañana", afirma Antonio Roldán, pero que "es una gran noticia para el futuro de la comunidad".

Roldán informa que primero deben "ponerse en contacto con la administración pata comunicar la aprobación del proceso de modernización". Primera medida que irá acompaña por la concentración parcelaria y que también depende de la administración regional.

Una vez realizados estos primeros trámites, que no se espera que se produzcan en un corto periodo de tiempo, el canal de San José "encargará los estudios correspondientes para conocer qué tipo de modernización es la más conveniente y económica", señala Roldán. Y es que la comunidad del San José, a diferencia de la del Toro-Zamora, no dispone de un canal "nuevo" y las obras deberán tener en cuenta si es aceptable trabajar sobre las instalaciones actuales o ejecutar una construcción nueva. Del mismo modo se debe analizar la posibilidad de instalar tomas en el río, "si Confederación Hidrográfica del Duero las autoriza", u otras opciones como las balsas de agua.

Por el momento todas estas cuestiones son una incógnita y las nuevas instalaciones modernizadas del San José no estarán listas hasta "dentro de unos años", confirma el presidente de la comunidad.

La victoria del "sí" ha sido recibida con gran alegría entre la gran mayoría de agricultores del canal de San José. Muchos de ellos son jóvenes, no son propietarios (arriendan las tierras) y necesitan de los cultivos hortícolas para sacar beneficios por su trabajo. Es decir, que con el riego a manta, perjudicado en extremo por las dotaciones de agua, se hace imposible -más si cabe en los años de poca agua- cultivar productos de verano y obtener el rédito suficiente al final del año. Ahora, con la modernización muchos propietarios de avanzada edad se replantearán la posibilidad de vender y con las nuevas instalaciones los cultivos hortícolas serán una opción a tener en cuenta.

Miedo a los costes

Por otro lado, algunos miembros del núcleo duro promodernización se encuentran "aliviados" con la resolución, ya que, a su juicio, "era imposible continuar con este modelo de minifundios y pretender competir contra explotaciones mundiales modernizadas".

No obstante, este grupo de agricultores, algunos de los cuales amagaron con presentar una candidatura opositora a Roldán en las últimas elecciones, señalan que "su miedo" es a que "nos metan otra chapuza como la del Toro-Zamora"; no en vano muchos de los agricultores son comuneros de ambos canales. Algunos de ellos hablan incluso de unas obras de renovación que "rondarían los 11.000 euros por hectárea, según nos han comunicado algunos de los expertos que vinieron a informar sobre la modernización".

Señalan en primer lugar a Seiasa (Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias), quien parece tener todas las papeletas para llevar a cabo el proyecto de modernización, y reclaman la posibilidad de que "CHD nos permita contratar a una empresa privada mediante un proceso de concurso".