La ciudad de Toro dice adiós a la VII edición de la Feria del Vino, organizada por el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Toro y en la que un año más los caldos de la tierra han sido calificados como "excelentes" por un grupo de expertos catadores. Como cada año, la localidad de Doña Elvira se convierte en el epicentro del vino en España. Cerca de una treintena de bodegas de la tierra se reúnen en la plaza de toros local, donde dan a conocer sus últimos productos a los miles de visitantes que se concentran en el coso taurino durante todo el fin de semana. Además de la tradicional degustación de vinos, los asistentes al evento pudieron disfrutar, los que así lo quisieron, de una masterclass de coctelería con vino de la tierra, de la mano del experto Óscar Díez.
A la espera de los últimos resultados oficiales, todo parece indicar que esta edición ha sido una de las que mayor afluencia ha registrado de los últimos años. Solo durante la jornada inaugural del sábado la taquilla de la Feria vendió cerca de 2.000 entradas, sin contar en este montante la asistencia de autoridades, empleados de las bodegas e invitaciones discrecionales de las industrias participantes. Ayer, según estimaciones del Consejo Regulador de la DO TORO, el flujo de visitantes que acudió al albero toresano todavía fue mayor que el registrado durante la jornada sabatina.
Felipe Nalda, presidente del Consejo Regulador, en declaraciones a este diario, se mostró "muy satisfecho por el desarrollo general de la Feria". Asimismo, Nalda considera que "se ha conseguido cumplir el objetivo" de esta séptima edición, ya que, según las impresiones del presidente de la DO Toro, "la Feria ha logrado fidelizar a un público que viene todos los años" y, a la vez, "continuar sumando nuevos visitantes año a año".
Por otro lado, otra de las novedades que deja esta Feria del Vino de Toro son los anuncios, por parte de la Diputación de Zamora y la Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León, de nuevas líneas de ayudas para la promoción de la Ruta del Vino en la zona y la modernización de las explotaciones vitivinícolas asociadas al sello de calidad toresano. En el caso de las subvenciones para las rutas provinciales, la Diputación ya comunicó hace un mes que el Patronato de Turismo destinaría 100.000 euros para este menester. En cuanto a las ayudas europeas, canalizadas desde la Junta regional, para la modernización de las instalaciones bodegueras, Nalda duda de que sean suficientes para cubrir todas las necesidades de las bodegas locales, toda vez que las peticiones parecen exceder el dinero presupuestado en dichas subvenciones.
De cara al próximo año, el Consejo Regulador no avanza muchos detalles, pero ya se encuentra trabajando en algunos detalles para la nueva edición de la Feria del Vino. Todo parece indicar que el estilo continuista va a ser la nota dominante de cara al 2019 (degustación de vinos, concurso de barricas, seminarios prácticos de coctelería con vino local...), pero Felipe Nalda no descarta implementar "algún tipo de variante más atractiva".
