El equipo de Gobierno socialista en el Ayuntamiento de Toro revisará antes de que concluya el mandato el contrato del suministro de agua potable, saneamiento y depuración de aguas residuales con la actual empresa adjudicataria. Así lo ha anunciado el alcalde, Tomás del Bien, en respuesta a las críticas vertidas recientemente por el PP sobre su "incumplimiento" de revisar, de forma inmediata, el citado contrato, cuya legalidad fue cuestionada en reiteradas ocasiones por los socialistas durante el anterior mandato. Del Bien enmarcó estas críticas en la "política fangosa" utilizada por los concejales populares que, a su juicio, "han salido del letargo, porque han estado haciendo el vago durante tres años, sin aportar nada a Toro".

Recordó el alcalde que, en reiteradas ocasiones el PSOE cuestionó la legalidad del contrato del agua, para a renglón seguido reconocer que "tampoco tuvimos a nuestra disposición ningún expediente en su momento", aunque anunció que el equipo de Gobierno "revisará cuando pueda" el polémico contrato. En este punto, subrayó que el Gobierno local "ha estado más afanado" durante el presente mandato en buscar soluciones para resolver otras cuestiones como rebajar la deuda, que ha pasado de 8 millones de euros a casi la mitad, o en reducir el tiempo que deben esperar los proveedores para cobrar facturas, que ha pasado de 140 a 70 días. En el plano económico, también destacó el esfuerzo por incrementar la recaudación para que "todos paguen" o que "no se nos olvidara cobrar el ICIO a nadie", inacción que, hace años, "supuso un importante quebranto económico para las arcas municipales".

Del mismo modo, subrayó que el equipo de Gobierno ha tenido que "legalizar contadores de luz" para no pagar por aquellos que no correspondían al Ayuntamiento o el suministro eléctrico del palacio de los Condes de Requena que "estaba con luz de obra". No obstante, matizó que en la consecución de estos objetivos, el Ayuntamiento ha contado con "escasa colaboración" por parte de las instituciones, entre las que destacó a la Diputación, porque "nada aporta a Toro".