"Ante ciertos libros, uno se pregunta: ¿quién los leerá? Y ante ciertas personas uno se pregunta: ¿qué leerán? Y al fin, libros y personas se encuentran", André Gide (premio Nobel de literatura de 1947). En Toro, la plaza donde se citan obras y lectores, tal y como vaticinaba el maestro Gide, es la Casa de Cultura de Toro; un enclave fundamental en la vida diaria de la ciudad y donde conocimiento y deseo de aprender convergen en las distintas propuestas que la institución promueve a lo largo del año.

El palacio de los Marqueses de Castrillo, una edificación que data de la segunda mitad del siglo XVI, es conocido en la actualidad como la Casa de Cultura de Toro. Construido en estilo renacentista, presenta asimismo algunas influencias tardogóticas como su fachada exterior. En la galería de su patio interior, se muestran objetos y restos arqueológicos hallados en el municipio y sus alrededores que datan desde la época romana hasta fechas más recientes. El 30 de abril de 1983 se inaugura en esta construcción el centro cultural de la ciudad, que hace las veces de biblioteca y centro de exposiciones en la actualidad.

No todo el palacio está destinado a la función pública, sus gigantescas dimensiones hacen que las salas habilitadas al público se reduzcan a menos de diez: sala de exposiciones permanentes, espacio de galerías temporales, salón de actos, fonoteca, biblioteca, depósito y la sala del patronato de la Fundación González Allende, que da nombre a este organismo.

Dentro de los muchos y diversos servicios que ofrece la Casa de Cultura el de la biblioteca es el principal y más utilizado por los vecinos de la ciudad de Doña Elvira. El centro público cuenta con más de 51.000 libros, 5 periódicos diarios, 9 títulos de revistas y cerca de un total de 12.000 documentos electrónicos y audiovisuales. Exposiciones, presentaciones de libros y ciclos cinematográficos son algunas de los otros servicios a los que pueden acceder los habitantes de Toro y su alfoz.

Dentro de la Casa de Cultura la arquitectura lo envuelve todo. El estilo de las edificaciones renacentistas otorga un halo de solemnidad enfática a sus interiores. Todo es grande, mastodóntico, ofreciendo una impresión donde nada es abarcable. Los techos son altos, las paredes están revestidas de piedra y los suelos marmóreos. Los trabajadores del lugar sienten especial predilección por la sala de préstamos de adultos; cuya forma y luminosidad "invita a la concentración y lectura", en palabras de algunos de ellos.

Durante estas vacaciones, el Ayuntamiento ha variado el horario de la biblioteca para facilitar a los estudiantes la preparación de sus exámenes. Hasta el día 5 de enero la biblioteca se mantendrá abierta de 9.00 a 14.00 horas, en horario de mañana, y de 16.00 a 21.00, durante las tardes; a excepción del próximo viernes, que la Casa de Cultura cerrará durante la jornada vespertina.