Antes de que concluya el año, el Ayuntamiento de Toro espera que hayan finalizado las obras incluidas en expedientes de órdenes de ejecución y que afectan a edificios que presentan un notable deterioro, con el consiguiente riesgo para los ciudadanos. El alcalde de Toro, Tomás del Bien, recordó que el Ayuntamiento ha tramitado diversos expedientes que conllevan la notificación de órdenes de ejecución para "velar por los intereses de los ciudadanos" y para que los propietarios de los inmuebles que han motivado los requerimientos cumplan con la ordenanza municipal, que especifica que los edificios deben reunir unas condiciones óptimas en cuanto a salubridad, habitabilidad y ornato público. Una de las órdenes de ejecución que ya ha sido atendida es la que afecta a un inmueble situado en la calle Perezal, cuyo mirador de madera presentaba un notable deterioro desde hace varios años. Después de que el Ayuntamiento "haya agotado las vías amistosas", los propietarios del edificio han procedido recientemente a acatar las directrices de la orden de ejecución para evitar que el balcón de madera pudiera provocar daños en los viandantes por un posible desplome.

Del mismo modo, como apuntó el alcalde, los propietarios del edificio que, hace años, albergó una conocida discoteca de la ciudad, también han acatado la orden de ejecución y han procedido a retirar un alero de la fachada que presentaba un notable deterioro. Sobre esta intervención, Del Bien apuntó que, en base a un informe policial, fue preciso vallar la zona para evitar posibles incidentes, pero tras remitir a los propietarios de la antigua discoteca la orden de ejecución, éstos han procedido a retirar el alero en mal estado. Otra de las órdenes de ejecución notificadas por el Ayuntamiento afecta a un inmueble en ruinas situado en la calle Prisión cuyo deterioro y peligrosidad ha motivado las quejas de los vecinos de la citada vía.

En concreto, la orden de ejecución afecta a los números 11 y 13 de la calle Prisión y el Ayuntamiento espera que, antes de que concluya el año, los propietarios lleven a cabo la intervención que detalla la orden de ejecución. Otro de los edificios afectados por los requerimientos que ha remitido la institución local es el que alberga el Círculo de Recreo, conocido en Toro como el Casino. En este caso, los responsables de este local social han presentado una solicitud de prórroga al Ayuntamiento para poder posponer unos meses la ejecución de las obras de mejora de la fachada del inmueble, situada en la calle Perezal. Esta petición de prórroga se fundamenta en que el Casino ha acometido recientemente la restauración de la parte de la fachada situada en la Plaza Mayor, aunque también ha retirado los paramentos que suponían un peligro para los viandantes en Perezal, por lo que precisa reunir los fondos necesarios para acometer las obras exigidas, sin necesidad de tener que incrementar las cuotas a los socios. Por otra parte, el alcalde anunció que el Ayuntamiento tiene previsto continuar con la revisión de solares y fachadas en mal estado que "supongan un peligro para los ciudadanos".

De hecho, según la ordenanza municipal, los propietarios están obligados a mantener sus edificios en condiciones de seguridad, salubridad, accesibilidad, ornato público y decoro, al objeto de preservar o recuperar las condiciones requeridas para la habitabilidad o el uso efectivo. En caso de incumplimiento, el Ayuntamiento puede dictar una orden de ejecución de obras tras la emisión de un informe técnico. Si el propietario no realiza las obras en el plazo ordenado se podrán imponer multas coercitivas, incoar un expediente sancionador o llevar a cabo una ejecución subsidiaria de las obras y su coste será abonado por el propietario.