Verbena de pueblo. Estas tres palabras sirven para definir una cosa y evocar mil connotaciones muy marcadas: agosto, camisetas de peña, "cachis" de plástico y, sobre todo, orquestas con carteles cutres. De toda la vida la verbena comienza con Rocío Durcal, continúa con "El de los ojos negros me vuelve loca", grita con "Fiesta Pagana" y cierra con "Clavado en un Bar" de Maná. Esto era así, esto era una verbena de pueblo, donde probabas el alcohol por primera vez y donde tu madre te obligaba a bailar con ella mientras te señalaba y movía los brazos de forma desacompasada.

Quién iba a decir que esta verdad inmutable que son las verbenas de pueblo tenga los días contados. La música evoluciona, es algo innegable, y el imperio de la música electrónica ha llegado para quedarse, con la salvedad del reguetón. Quizás el mejor ejemplo del ascenso de este estilo de música es "Tomorrowland", un festival belga que en apenas 12 años ha pasado de ser un evento alternativo con 9.000 asistentes a ser un fenómeno de masas con más de 400.000 espectadores.

"Villatechnillo" es un festival de música Techno que la pasada madrugada del domingo celebró su décima edición. Villavendimio, un pueblo con menos de 200 habitantes censados, tiene uno de los festivales de música electrónica más importantes de la región. Las verbenas han pasado a mejor vida, ya en muchos lados, capitales de provincias, como pequeños municipios, las orquestas han cedido el testigo a discomóviles centradas en la música de moda o en concursos de DJ´s que atraen a un gran público joven.

La música Techno atrajo a Villavendimio a más de 500 personas que disfrutaron de una sesión que se alargó más allá de las nueve de la mañana. La décima edición de "Villatechnillo" contó con ocho DJ´s que hicieron las delicias de los asistentes. Quizás la actuación que recibió una mayor ovación fue la de Gayle San y Paula Cazenave, un B2B (Back to Back, Espalda contra espalda) legendario que junto a dos artistas especialmente versadas en el mundo de la música electrónica. Gayle San, de 50 años, es una DJ nacida en Singapur presente en la escena del Techno desde antes de los años 90. Por su parte, Cazenave, nacida en San Sebastián en 1977, comenzó con 19 años a pinchar y desde entonces es una habitual encima de los escenarios. La benaventana Laura Gok se encargó de abrir el festival y poner la presencia de la tierra en la décima edición de "Villatechnillo".