Día grande en la ciudad de Toro. La ola de calor no impidió a los toresanos salir a la calle a celebrar una de sus fiestas religiosas más conocidas: el Corpus Christi. Ellas de mantilla y tacones, ellos con traje y corbata. La archicofradía de nombre homónimo a la festividad pidió el pasado viernes que la ciudad se engalanase para rendir culto al Santísimo, y vaya si lo hizo: los balcones presentaban banderas de España y paños de lino con motivos religiosos, asimismo al paso de la imagen principal de la procesión se iban sucediendo distintos altares para honrar la ruta de la congregación. Tampoco faltaron los niños que este año hicieron su primera comunión, que ataviados con sus correspondientes trajes y vestidos acompañaron a la comitiva procesional.

El Solemne Triduo Eucarístico celebró ayer su colofón con una misa a las seis de la tarde en la Colegiata Santa María la Mayor. Tal y como manda la tradición, tras la ceremonia la procesión recorrió las rúas toresanas, aunque con un itinerario diferente debido a las obras que se están efectuando en la calle de San Lorenzo. Este año el desfile procesional partió de la Santa Iglesia Colegial de Santa María La Mayor, para continuar por la plaza de La Colegiata, calle La Mayor, Puerta del Mercado, plaza Santa María (dando la vuelta completa), Amor de Dios, La Reina, Cañuelo, Tablarredonda, Judería, Perezal, La Mayor y plaza de La Colegiata, para acabar, de nuevo, en el templo de salida.

Una de las novedades de este año fue la presencia anunciada de la Cofradía de Jesús Nazareno y Ánimas de la campanilla con el fin de "devolver el esplendor a una celebración de esta envergadura". Desde por la mañana, la hermandad nazarena participó codo con codo con la archicofradía del Santísimo Corpus Christi en el montaje de altares en diversos puntos de la ciudad para ensalzar la celebración. El altar levantado por los nazarenos, en colaboración con las Damas de la Soledad, estuvo presidido por la Virgen del Amor Hermoso. La imagen es una talla vestidera del siglo XVIII retocada por Ramón Álvarez. Además de Jesús Nazareno, numerosas congregaciones de la ciudad se sumaron a la fiesta.

Con motivo de la fecha, la Cofradía del Santísimo Corpus Christi celebró su asamblea general el pasado sábado en el salón de actos del colegio Amor de Dios. La reunión se desarrolló con normalidad, se aprobaron todos los puntos del día y se dio el visto bueno a las cuentas de la congregación. Las únicas novedades fueron la adquisición de nuevos banderines para adornar las farolas y el pago de la Banda Municipal de Música para la procesión, que este año fue sufragada en su totalidad por las parroquias de la ciudad de Toro.