Al margen de las agresiones, un grupo de trabajadores también ha mostrado abiertamente su preocupación por el futuro de la residencia Virgen del Canto de Toro ya que, como matizó, en la actualidad "hay muchas plazas libres", y ni la dirección del centro ni la propia Diputación se "pronuncian" sobre esta situación. Ante la falta de ingresos de nuevos usuarios, algunos empleados, con el respaldo de los sindicatos, han remitido un escrito a la institución provincial para intentar recabar información sobre el futuro del centro y si existen "problemas" que impidan ocupar las plazas libres. De hecho, como apuntaron, en la actualidad, en la residencia hay más trabajadores que usuarios porque, en los últimos meses, no se ha producido ningún ingreso, a pesar de que en la provincia existe una gran demanda de plazas en residencias geriátricas. No obstante, matizaron que una gran parte de la plantilla no se ocupa de la atención directa de los usuarios, ya que muchos trabajadores desempeñan su labor en otros servicios del centro.

En los últimos años, la Diputación Provincial ha ejecutado diversas obras de mejora en la residencia Virgen del Canto de Toro que sirvieron para remodelar los módulos que albergan las habitaciones de los usuarios, aunque también se renovaron otras dependencias como la enfermería, la sala de rehabilitación o las utilizadas por el servicio de cocina.