Tras más de un año sin celebrar ningún acto religioso, La Colegiata Santa María la Mayor de Toro reabrió sus puertas para celebrar la festividad de Las Candelas. Sería exactamente este evento, el dos de febrero de 2016, el último culto católico que se desarrolló en el principal templo de la ciudad. Desde entonces, la iglesia permaneció como la principal sede de AQVA.

El interior de la Colegiata pronto se llenó hasta copar todos los asientos con los vecinos de la localidad y algunos turistas que pasaban por la ciudad. La celebración de Las Candelas se reinstauró hace dos años tras no efectuarse desde los años 20, gracias al trabajo conjunto de las parroquias y de la Asociación Etnográfica de Tierras de Toro, que es quien realiza el acto principal de la ceremonia. Asimismo, la Asociación Musical "La Mayor" también participó del acto interpretando algunas piezas de música sacra.

La eucaristía estuvo oficiada por el párroco local, Roberto Castaño. Quien se congratuló por el retorno del culto al templo y de que durante estos meses haya servido para que el público de fuera conociera todo lo que tiene que ofrecer Toro.

La imagen de la Virgen esperó en una sala contigua a que el clérigo diera su permiso tras el ofertorio que realizó uno de los miembros de "Tierras de Toro" de rodillas en el altar de la Colegiata. Una vez obtenido el beneplácito del presbítero, la imagen de la Virgen procesionó por el interior del templo hasta el altar mayor, custodiada por los integrantes de la asociación ataviados con trajes regionales y las candelas en la mano. Además, tal y como exige la costumbre, junto a la efigie se ofrecieron dos palomas vivas y un bollo maimón. Durante el breve recorrido que realizan las integrantes de la Asociación Etnográfica entonaron el tradicional canto que antiguamente se realizaba en esta ceremonia.