Una lechuza se ha convertido en la primera moradora de las cajas nidos instaladas en el término municipal de Morales de Toro, en el marco de un proyecto impulsado por la asociación naturalista Grefa, en colaboración con el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), basado en el control biológico de las plagas de topillo a través del impulso de la reproducción de rapaces depredadoras de micromamíferos. Poco más de doce horas habían pasado desde el final de la segunda jornada de trabajo dedicada por voluntarios de la asociación Grefa a la instalación de las cajas nido cuando, al acercarse a una de ellas, pudieron comprobar que, estaba ocupada por una lechuza.

En este punto, la asociación matizó que Morales de Toro es un municipio que cuenta con pequeñas masas de árboles en las que las lechuzas encuentran refugio, pero no oquedades adecuadas para poder anidar. No obstante, como apuntó Grefa, será necesario esperar a la próxima primavera para comprobar si las aves rapaces "sacan adelante" los polluelos en los nidales instalados. Morales de Toro se ha sumado recientemente al proyecto de control biológico del topillo en Castilla y León basado en la colocación de cajas nidos para favorecer la cría del cernícalo vulgar y la lechuza común, depredadores de topillos y de otros roedores. En total, 21 municipios forman parte de este proyecto que, desde el año 2009, se ha implantado de forma paulatina en Castilla y León, a través de la recuperación de depredadores naturales.

Para implantar este proyecto en Morales de Toro la asociación Grefa mantuvo varias reuniones informativas con agricultores y el Ayuntamiento y, una vez colocadas las cajas nido, se evaluará la ocupación que de las mismas realicen los cernícalos y las lechuzas, así como las densidades de topillo, lo que permitirá valorar la eficacia de un método que pretende ser sustitutivo de rodenticidas químicos cuya aplicación en los medios agrícolas afecta a muchas especies silvestres de gran importancia ecológica y cinegética.