El propietario de la bodega Dominio del Bendito, Antony Terryn, que lleva unos años instalado en la DO Toro, plantea unas reflexiones interesantes sobre la nueva normativa de la Junta de Castilla y León.

-La Junta de Castilla y León ha aprobado una nueva orden que permitirá realizar nuevas plantaciones vitícolas y facilitará los trámites administrativos a los viticultores. ¿Qué le parece esta medida?

-Hay muchas cosas que no están bien definidas, no se sabe aún quien tendrá derechos excepcionales ya que ahora no se puede comprar ni vender. En teoría está destinada a los jóvenes agricultores pero, ¿quiénes son éstos? Cuando yo me instalé aquí tenía 29 años y nunca se me reconoció como joven agricultor. La Junta me encasilló donde consideró oportuno para no ayudarme en nada. Hoy en día, reúno las condiciones para hacer explotación prioritaria y se me ha rechazado aunque pelearé hasta las últimas consecuencias para que se me reconozca.

-¿Será positiva y efectiva esta ley en la Denominación de Origen Toro?

-Para nada. Los criterios de repartición no son claros y no entiendo el arranque de viñedo viejo para tener más derechos y producción. Por ejemplo, la DO Toro produce más uva que vino y no es entendible plantar nuevo cuando sobra producto. Ahí no acuso del todo a la Junta ya que hay una ley europea que nos prohibió el plantar pie directo que no tiene sentido a nivel técnico porque aquí no hay filoxera. Entonces, ¿por qué debemos seguir normas absurdas que no tienen sentido? A raíz de esta legislación hemos traído las plantas de fuera y ahora hay más de 60 hongos que antes no estaban presentes. Me parece una equivocación histórica y la responsabilidad es del conjunto de Europa, España y las Comunidades.

-Usted es defensor de los viñedos viejos y de la tradición vinícola de la zona. ¿Deberían estar considerados estos pagos como patrimonio de Toro?

-Sí. Deberían estar protegidos. Ahora en Australia hay zonas que están protegidas las viñas viejas y tienen un tipo de legislación especial. Eso se considera un tesoro y se paga la uva en relación y aquí es todo lo contrario.

-En cuanto a la producción de vinos, la añada de 2015 ya está comenzando a ver la luz en la Denominación de Origen Toro. ¿Cómo está siendo la producción en la bodega Dominio del Bendito?

-He estado probando vinos y yo creo que tienen un déficit de acidez, el vino está un poco blando y para mí 2015 no es una añada tan buena como quizás se espera. Una circunstancia que se ha debido a que el tiempo no ha acompañado.La falta de precipitaciones ha influido ya que la planta necesita agua en su justa medida para que a nivel de morfología y crecimiento esté a gusto. Una viña que sufre o está demasiado estresada no da buen vino.

-Yo creo que a los vinos de este año les faltará frescura, serán un poco densos. Va a ser una cosecha que no nos ayude a paliar el reproche que se le hace a la DO Toro de ser vinos fuertes. En este sentido, añadas como la del 2013 nos ayudan más a conquistar en tierras de otros.

-Las cualidades de sus vinos han sido premiadas en diversos certámenes, ¿qué significa para usted que su bodega se codee con las mejores empresas del mundo?

-Todo reconocimiento es motivo de alegría. En este sentido, quiero destacar el premio que nos darán en abril en el "Salón de Gourmets" de Madrid a nuestro rosado "Perlarena". Un vino que ha sido elaborado con uva plantada en la zona pero que no pertenece en su totalidad a la DO. Con esto, he demostrado que variando el proceso de elaboración se puede hacer un buen rosado a pesar de las reticencias de algunos de que esta variedad no puede ser exitosa en Toro.

- Luis Gutiérrez, catador de Robert Párker, consideró que Dominio del Bendito era la bodega toresana en la que apreciaba un mayor avance. Además su tinto La Cuesta de las Musas 2012 obtuvo la mejor valoración con 96 puntos. ¿Qué sintió tras recibir dicho reconocimiento?

-Todo un honor pero a veces a Robert Párker la gente le ha puesto pegas. Yo personalmente he pensado que en algunas zonas se había equivocado y en otras entendía mucho. Por otra parte, me encanta Luis Gutiérrez porque consideró que es alguien que tiene un gusto que puede ayudar a la DO Toro. Nuestra zona no es solamente potencia y fuerza sino que también permite hacer un vino muy fino. Aun así, creo que nos faltan un elevado número de botellas embotelladas históricas que si poseen otras zonas como Ribera o La Rioja. En cuanto al reconocimiento estoy muy contento pero debo añadir que el comportamiento del mercado a veces es un poco absurdo e irracional. Creo que no hace falta gastarse mucho dinero para adquirir un buen vino.

-Uno de los lemas de su bodega es la de producir "vinos con alma".

-Hay que intentar hacer un producto en el que uno cree y pone su empeño y su pasión. La pasión es fundamental, por haber diferentes estilos pero si la gente pone cariño se acaba notando en el producto.

-Desde Dominio del Bendito también se transmite su pasión por la Tinta de Toro. ¿Qué tiene de particular este tipo de uva para ser para usted tan especial?

-Es una uva con la que no me canso de trabajar, de descubrir o de interpretar. Es una variedad increíble y muy difícil de domar. Yo creo que lleva muy bien su nombre porque es un toro difícil que lidiar. Nunca me cansaré de la Tinta de Toro además, aquí alcanza una variedad que no consigue en ningún otro lugar del mundo.

-La ecología es uno de los pilares de su producción. ¿Considera usted que marcará el futuro del vino?

-Por supuesto. Cada vez más, incluso ahora hay una corriente de vinos naturales que es otro debate. No estoy al 100 % de acuerdo pero la idea es buena. Además, soy un apasionado del submarinismo y veo también en el mar el deterioro del medio ambiente. Ahora parece que todo vale para conseguir beneficios y yo no creo que sea así ya que el dinero no da la felicidad ni una vida sana.