La sociedad Grafen-Bull presentó a finales del pasado mes de octubre, en el Juzgado de lo Mercantil de Zamora, una oferta definitiva por valor de diez millones de euros para adquirir la unidad productiva de instalaciones Pevafersa S.L. que actualmente se encuentra en concurso para poder comenzar la actividad en la misma a comienzos del próximo año.

Una propuesta con la que por la sociedad pretende adquirir por dicha cantidad de los terrenos e inmuebles de la fábrica de Toro, la maquinaria y equipamiento existentes en esas instalaciones así como otros activos existentes de acuerdo al inventario completo elaborado por la administración concursal.

Por otra parte, responsables de Grafen Bull han puesto de manifiesto la hoja de ruta que, en principio se realizará en la planta durante los próximos meses en diversos aspectos como los planes de inversión, los puestos de trabajo así como las inversiones a realizar en la fábrica o la proyección comercial que tendrá la misma

Así las cosas, dentro del plan de inversión, la sociedad pretende inyectar de forma inmediata 25 millones de euros que irían en aumento durante los siguientes meses y años para superar, a medio plazo, los 150 millones en este aspecto.

En cuanto a los puestos de empleo, Grafen-Bull estima la creación de 300 puestos de trabajo directos además de otros indirectos que la actividad generará en sus primeras fases dado que se prevé que para la segunda mitad de 2016 se alcance la fase de capacidad de producción completa.

La sociedad también tiene previsto realizar la introducir y desarrollar mejoras en la producción y en la calidad y eficiencia del producto a fabricar en la nueva Pevafersa. Una innovación que pretende posicionar a la firma a la vanguardia tecnológica en la fabricación de células y placas fotovoltaicas así como la realización de un permanente esfuerzo en desarrollo de Investigación, Desarrollo e Innovación.

Además, desde Grafen-Bull han anunciado que existen ya contratos de comercialización suscritos para comenzar a suministrar producto en los primeros meses de 2016 y que supondrán la ocupación plena de la capacidad inicial de fabricación en la planta toresana. Una previsión de partida con la que se abordaría de manera inmediata la ampliación hasta el doble de la capacidad productiva existente en el momento en que Pevafersa entró en situación concursal.

Finalmente, los responsables de Grafen-Bull espera que a finales del presente mes de noviembre o a comienzos de diciembre se produzca la resolución definitiva de la adjudicación de los bienes. Una adquisición que permitiría durante el inicio del próximo mes de diciembre ultimar los preparativos para la puesta en marcha de la fábrica de Toro entre enero y marzo del próximo año realizándose en dicho mes la primera producción que saldría al mercado.