La Feria del Stock y Vehículos de Ocasión de Toro clausuró ayer su segunda edición con sensaciones encontradas. Por una parte, con la satisfacción del trabajo bien hecho y la consolidación de una propuesta muy interesante para la ciudad. Por la otra, la menor afluencia de público con la que se ha contado respecto al pasado año. Pese a que el tiempo ha acompañado, al no producirse días de excesivo calor, los toresanos no han encontrado el momento de acercarse hasta el coso taurino. Aunque, explican los comerciantes, más ausencia se ha notado por parte de los turistas que en la pasada edición sí que se contaron en gran número. Pese a ello, afirman desde el sector que seguirán intentándolo hasta conseguir hacer de esta cita un referente para el comercio en la ciudad.

"A golpes". Así definen algunos comerciantes la afluencia de público a esta segunda Feria del Stock y Vehículos de ocasión a lo largo del fin de semana. Durante los tres días que ha durado este mercado reunido en la Plaza de Toros, los visitantes han aprovechado sobre todo las tardes para acercarse y realizar sus compras. "La sensación general es que ha habido menos gente que durante la primera edición", explica uno de los empresarios del sector del calzado. "Aún así, seguimos al pie del cañón y confiamos en iniciativas como esta, que siempre son buenas tanto para la ciudad como para los negocios", detalla. Y es que las mañanas han sido demasiado duras para la feria, con gente a cuentagotas en los accesos al coso taurino. "Por las tardes se nota un mayor tráfico de gente", explica otro de los participantes.

La novedad del año pasado, que hizo a la gente moverse hacia la Feria del Stock, ha dado paso a una postura más conservadora para el cliente. Sin embargo, esa no es la única razón que esgrimen los comerciantes. "Puede ser que las fiestas de los alrededores, como La Bóveda o Fresno de la Ribera, hayan restado gente a la feria", detalla uno de ellos. Y lo que también se ha notado ha sido la menor afluencia de turistas respecto a la primera edición. Un público que aprovechaba la visita a la plaza decimonónica para ojear los stands y realizar alguna que otra compra entre los catorce puestos que se han instalado para la ocasión.

Durante la experiencia piloto de "Toroportunidad" celebrada el año pasado en similares fechas y en el mismo entorno, cerca de 10.000 personas acudieron a la cita, que se convirtió en un rotundo éxito de participación y ventas. A su finalización, CEOE y Azeco se propusieron organizar una nueva cita que se consolidara y sirviera para dar continuidad a un proyecto buscado con tesón. Y lo han cumplido. Las asociaciones de comerciantes han sabido organizarse y volver de nuevo con esta Feria del Stock que, aunque con menor público, ha vuelto a movilizar a los negocios y la gente de la ciudad. Una labor que hay que reconocerle a los empresarios, que no dejan de buscar iniciativas para dinamizar el consumo.