La jornada de caza organizada por la Sociedad de Cazadores de Toro contó con una gran participación en la que se cubrieron todas las plazas ofertadas. Más de ochenta personas se dieron cita en los campos de Monte la Reina para participar de una jornada festiva que terminó con el preciado botín de los diecisiete ejemplares abatidos por los expertos cinegéticos que acudieron al evento. Sin embargo, esto no fue todo y tras concluir la montería, aún quedaba tiempo para poner el colofón gastronómico al acontecimiento. Allá, bajo el Cristo de la ciudad de Toro, los cazadores dieron buena cuenta de una comida organizada por el Club que supuso el perfecto punto y final a la jornada. En definitiva, se trató de poner el punto y final a un día de convivencia y gran ambiente por los campos toresanos en lo que lo más importante, como siempre ocurre en estas ocasiones, es el factor humano que rodea al propio acontecimiento.