La decisión de la Consejería de Agricultura de revocar las ayudas comprometidas con las comunidades de regantes para la modernización de las infraestructuras dejará al canal Toro-Zamora con una pérdida de 474.711 euros o, lo que es lo mismo, un total de 166 euros por hectárea que los agricultores dejarán de percibir. En su paquete de recortes, la Junta de Castilla y León ha decidido llevarse por delante el dinero convenido con 29 comunidades, tres de ellas zamoranas, para ahorrar un total de 24 millones de euros. Tras conocer esta noticia, la Asociación Ferduero de Comunidades de Regantes de la Cuenca del Duero, a la que pertenece el canal Toro-Zamora, ha decidido convocar en reunión a sus asociados para el próximo martes con el objetivo de buscar una solución a este problema.

El presidente del canal Toro-Zamora, Alejandro Fraile, ha declarado que «el perjuicio económico es muy grave» para los regantes, aunque afirma que aún no hay nada decidido sobre la manera de proceder a partir de ahora hasta que no se reúnan con los demás afectados de la Asociación Ferduero en un par de días. Lo que sí ha comentado es que la deuda contraída por la administración para con los agricultores es de carácter muy importante. No obstante, de las tres comunidades zamoranas afectadas -San Frontis, Virgen del Aviso y la propia Toro-Zamora- es ésta última la que más dinero deja de percibir ante la inminente revocación de las ayudas y subvenciones por parte de la Junta de Castilla y León.

Los recortes a este respecto los dio a conocer el pasado viernes el director general de Producción Agropecuaria y Desarrollo Rural de la Junta, Jesús María Gómez Sanz, quien quiso recordar que los pagos comprometidos por el ente público durante los últimos años se han ido abonando, siendo este el único curso en el que no van a poder hacer frente a esta partida. No obstante, los regantes del canal Toro-Zamora han visto cómo se han dejado de pagar las ayudas y subvenciones «aprobadas en los diferentes presupuestos de 2009-2012». De igual forma, explicó Gómez Sanz que en las últimas fechas mantuvo un encuentro con los dirigentes de la Asociación Ferduero para llegar a un acuerdo consistente en suspender hasta 2016 esta inyección económica. Una propuesta rechazada por los regantes.

Las ayudas de este conflicto surgieron de un acuerdo entre las comunidades de regantes, la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa) y la Junta de Castilla y León en el año 2007, donde la Consejería de Agricultura se comprometía a abonar 30,55 millones de euros en un plazo de 25 años, de los cuales ya se han pagado 6.21 en los últimos cinco años. No obstante, los regantes del canal Toro-Zamora han tenido que adelantar el dinero de la subvención durante cuatro años ante los retrasos en los pagos. Un dinero que, afirman, actualmente no han recuperado y con esta decisión de la Junta perderán definitivamente.

Aparte de la manida razón de la crisis, la revocación de estas ayudas tiene, según Gómez Sanz, otro motivo diferente. «La Junta de Castilla y León no puede mantener compromisos más allá del presupuesto anual; es imposible mantener un acuerdo que compromete a la Hacienda Pública durante 20 años», sentenció.