El Ayuntamiento de Toro ha solicitado a la Junta de Castilla y León que, con carácter de «emergencia», intervenga en el entorno del antiguo Alcázar, en una zona en la que hace un año se detectaron cesiones de terreno y que, en la actualidad, sigue vallada para evitar posibles incidentes. El alcalde, Jesús Sedano, explicó que esta cesión de terreno «nos preocupa» por lo que el Ayuntamiento de Toro ha remitido los informes técnicos preceptivos a la Comisión Territorial de la Patrimonio con el objetivo de intentar recabar las ayudas económicas necesarias de la Dirección General de Patrimonio para que, en la mayor brevedad posible, se pueda intervenir en esta zona que sigue vallada para evitar el paso de los ciudadanos.

Reconoció el mandatario municipal que «esperamos una pronta actuación porque la preocupación es grande ya que en esa zona puede ocurrir una desgracia cualquier día». Por este motivo, el equipo de Gobierno popular ha solicitado a la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Castilla y León que «se actúe por emergencia» y el alcalde confía en poder «obtener una respuesta positiva no tardando mucho tiempo», con el fin de evitar incidentes y proteger el antiguo Alcázar que cuenta con la declaración de Bien de Interés Cultural.

Por otra parte, Sedano confirmó que en la zona en la que se produjo una cesión del terreno es necesario realizar «trabajos de consolidación del muro», tal y como reflejan los informes elaborados por técnicos, tanto municipales como de la Administración regional que han reconocido el entorno del antiguo Alcázar. Reiteró el mandatario municipal que «lo que demandamos desde el Ayuntamiento es una reparación urgente porque podría haber un hundimiento de esa zona, algo que nos preocupa muchísimo y que, además, podría tener consecuencias sobre el edificio del Alcázar». Por este motivo, el Ayuntamiento ha procurado «dotar a esta actuación de carácter de emergencia» con el objetivo de que la Administración regional actúe «de forma inmediata». De otro lado, el alcalde recordó que, a finales del año 2009, en esta zona se llevó a cabo una excavación, tanto en los asientos de los muros del Alcázar como en sus alrededores, para buscar restos arqueológicos e intentar recuperar la fisonomía original de las murallas. Con este objetivo, tras la excavación arqueológica practicada, se optó por colocar una malla textil, cubrir los nuevos hallazgos y no compactar la zona en la que fueron descubiertos.