El medio centenar de bodegas acogidas a la Denominación de Origen del Vino de Toro han retirado hasta el pasado mes de mayo un total de 4.023.168. contraetiquetas, un 4,2% menos que en el mismo periodo del año anterior, cuando el Consejo Regulador dispensó 4.200.000 distintivos de calidad. Según los datos publicados por el ente regulador en su página web, este descenso en la retirada de «tirillas» tiene su origen, en parte, en que hasta finales de mayo las industrias vinícolas solicitaron al ente regulador menos distintivos para los vinos comercializados como tintos jóvenes y crianzas, mientras que en las categorías de blancos, rosados y reservas aumentaron las ventas de contraetiquetas.

La apuesta realizada por las bodegas de la zona por la elaboración de vinos blancos ha tenido una incidencia notable en la retirada de «tirillas» ya que, mientras que en los primeros cinco meses del pasado año, las industrias retiraron 257.500 contraetiquetas, en el 2011, se han adquirido un total de 351.668 distintivos de calidad.

Este aumento de ventas también es notable en la categoría de vinos calificados como rosados en la que se ha producido un incremento de 115.000 «tirillas», al pasar de las 152.500 comercializadas en 2010 a las 267.500 dispensadas hasta el 1 de junio de este año. Otra de las categorías en las que han aumentado las ventas es la que engloba a los vinos tintos reservas, al pasar de 47.000 «tirillas» adquiridas por las bodegas el pasado año a las 62.500 retiradas en el mismo periodo del 2011.

Por el contrario, las bodegas acogidas al marchamo de calidad toresano han solicitado en los primeros meses del año 2011 menos contraetiquetas para los vinos tintos jóvenes, que han pasado de 2.915.500 a 2.718.500, así como para los vinos calificados como crianzas para los que se han vendido 204.000 distintivos menos.