Respuesta positiva y el deseo de los hosteleros de implicarse en la organización. Tal puede ser el balance del V Festival «De tapas por Toro», que en esta edición ha contado con la participación de 21 establecimientos hosteleros. Los ciudadanos han respondido bien a la convocatoria y han acudido a los diversos establecimientos para probar las originales tapas que los participantes han elaborado con ingenio y esmero.

Según el responsable de la cafetería «Candy», Héctor Díez, el ambiente «ha estado bastante bien», lo que se refleja en las 900 tapas que han vendido. Curiosamente, lo más destacado para Díez es que «este año hemos tenido más gente durante los días de diario, de hecho, bastante más que los fines de semana». Por tanto, «estoy muy satisfecho con el resultado, y animado para el próximo año».

José Alberto Calvo, del Mesón Zamora, considera que el ambiente «ha sido maravilloso», satisfecho con la tapa que ha elaborado, de la que ha vendido unas 1.500 raciones. La mayor afluencia de gente la han notado durante los fines de semana, aunque a diario «también ha ido bien», pero los días más destacados han sido el viernes y el sábado.

Por otra parte, el responsable del bar «Noche y Día II», Alberto Sánchez, que ha elaborado una tapa «en pequeño homenaje a la Selección española», considera que «la aceptación ha sido muy buena, aunque ha bajado un poquito respecto a otros años»; no obstante, aseguró que «estamos contentos» pues han vendido unas 2.000 tapas. En cuanto a la afluencia de clientes, reconoció que, aunque otros años ha bajado en el segundo fin de semana, en esta ocasión se ha incrementado.

Otro de los establecimientos participantes ha sido la cafetería «Imperial». Uno de sus propietarios, José Manuel Hernández, destacó que éste ha sido «el mejor año» de cuantos se ha celebrado el festival, de forma que «incluso nos ha desbordado». Así, comentó que, habitualmente, hay una estimación de entre 40 y 60 tapas entre semana, mientras que durante el festival han puesto entre 100 y 120 diarias. Y el sábado elaboraron alrededor de 700, «que es algo que desborda a cualquier establecimiento». En total han vendido más de 3.000 tapas. Comentó que «parece que la tapa ha gustado mucho, puesto que ha habido gente que ha repetido». Respecto a la subida del precio de las tapas a 1,20 euros, Hernández aseguró que «no ha habido ningún problema, ni una sola crítica, ni una sola queja», por el contrario, ha observado que «se han disparado las ventas». Además, valoró de forma positiva la unión de los hosteleros, que prueban las diferentes tapas y las valoran.

Por su parte, la maitre del restaurante «Sarmiento», Silvia San Juan, calculó que han vendido más de 2.000 tapas. «La gente ha valorado el esfuerzo de emplear todos estos productos en una tapa muy elaborada». Los fines de semana ha sido cuando más asistencia de gente han notado, aunque «a diario también ha salido más gente de la que sale habitualmente». Concluyó que «estamos satisfechos porque nuestro objetivo era que a la gente le gustara la tapa y parece que lo hemos conseguido».

Por otro lado, desde el Mesón Zamora, José Alberto Calvo quiso hacer una propuesta al resto de hosteleros, que consiste en reunirse «para comprobar si la próxima edición del festival puede organizarse directamente por los hosteleros toresanos», porque «creo que somos capaces de organizarlo». Esta iniciativa fue bien acogida por otros hosteleros, y así, Alberto Sánchez, del bar «Noche y Día II», reconoció que «es una buena idea», y señaló que Azehos se ha prestado a ayudar en la organización.

José Manuel Hernández, de la cafetería «Imperial», afirmó que «lo veo muy bien», aunque señaló que «el único inconveniente es decidir quién se va a encargar de organizarlo». Y Silvia San Juan, del restaurante «Sarmiento», admitió que «me parece una buena iniciativa», ya que «creo que el colectivo debe estar unido a nivel local y a nivel provincial» y es que consideró que «es importante que todo el sector se una y tenga un objetivo común a nivel local».