El insigne director Jesús López Cobos, toresano de origen, aunque internacional en cuanto a su reconocimiento en su destacada y célebre labor musical, realizó ayer una visita a su ciudad natal, que no por breve dejó de tener una gran importancia. Y es que el motivo de su visita a Toro fue el de hacer la entrega oficial de una donación para la Escuela Municipal de Música de la localidad.

Se trató, concretamente, de un cheque por valor de 34.000 euros, recaudados a través de los ingresos de sus amigos, «amigos de todo el mundo a los que pedí que hicieran esta donación», esto es, solicitó que cambiaran sus regalos de cumpleaños por una donación para la Escuela de Música. Según aseguró López Cobos, «tengo un gran placer en que el resultado de esta colecta vaya a redundar en beneficio de la Escuela de Música y de los niños que van a estudiar en ella».

Afirmó también que, mediante esta donación, pretende continuar contribuyendo a que la afición musical permanezca viva en la localidad, ya que considera «muy importante para la formación de los niños» el hecho de que tengan la posibilidad de acercarse a la música y de ponerse en contacto con ella desde que son pequeños. Además, reconoció que él no contó con esa posibilidad cuando era niño, ya que no había escuelas, ni sitios «donde verdaderamente poder empezar de niño»; sin embargo, confesó que tuvo la suerte de poder escuchar música en la radio «gracias a que mi padre era aficionado a la música».

Por otra parte, ésta no es la primera vez que López Cobos colabora con la Escuela de Música que lleva su mismo nombre, y de hecho, la última donación consistió en la entrega de dos pianos, que pasaron a formar parte del conjunto de instrumentos propios del centro de formación musical toresano.

Fue hace muy poco tiempo, el 25 de febrero, cuando López Cobos cumplió 70 años. Un par de días después, durante una recepción celebrada en el hotel Beau-Rivage de Lausanne, en Suiza, ya realizó una entrega simbólica del cheque al alcalde de Toro, Jesús Sedano, quien fue uno de los 200 invitados a esta cena. Ayer Sedano, por su parte, quiso agradecer públicamente la atención que presta a la ciudad, «siempre está pendiente de Toro», y subrayó que «la verdad es que tenemos un hijo predilecto que ha hecho gala de su generosidad», en referencia a la donación realizada, motivo por el que, matizó, «tanto los niños como los profesores están muy contentos».

Por lo que respecta a la cantidad de dinero recaudada, el regidor municipal aseguró que «para nosotros, 34.000 euros es una cantidad muy importante», y anunció que se destinará a llevar a cabo diversas mejoras en el equipamiento de la Escuela de Música, tanto en lo referente a instrumentos como en otras posibles actuaciones. Además, destacó también que López Cobos siempre apoya la afición musical en Toro, lo que señaló como «otra de las cosas que caracterizan al maestro».

El periodo vacacional impidió que la entrega del cheque pudiera realizarse en las dependencias de la misma Escuela, por lo que se pensó en llevar a cabo este acto durante la cena. Esta cena, además, supuso una sorpresa para el director toresano, pues López Cobos pensaba en un principio que se trataba de una cena a la que tan sólo asistirían los amigos que habían hecho el viaje con él, así como los representantes del Ayuntamiento, mientras que al entrar en el comedor, los alumnos de la Escuela de Música comenzaron a tocar en su honor el «cumpleaños feliz», que «es una forma de celebrar otra vez su cumpleaños, que es lo mínimo que podemos hacer», afirmó Sedano. A esta cena asistió alrededor de un centenar de personas, principalmente niños que se forman en la Escuela, acompañados de sus padres.

Finalizada la cena, el director musical del Teatro Real de Madrid tuvo que marcharse, puesto que hoy mismo estrena, en el teatro citado, la ópera «Salomé», compuesta por Richard Strauss sobre un texto de Oscar Wilde. Respecto a este estreno, López Cobos señaló que se trata de una obra «importante para todos», aunque precisó que, personalmente, «levo unos quince años sin tocarla». Por otra parte, comentó que durante este periodo de tiempo ha cambiado mucho la orquesta, de forma que «sobre el 80% de la orquesta no la había tocado antes».

Según su opinión, se trata de una de las obras «fundamentales» del siglo XX, y supone «un reto para todos», incluso para los cantantes, ya que constituye una de las obras más difíciles de cantar para una soprano, que en esta ocasión será Nina Stemme. Anunció también que, además de este estreno, la obra cuenta con otras doce funciones.

Y respecto a la posibilidad de volver a dirigir una orquesta en Toro, López Cobos resaltó que espera tener «pronto» esta oportunidad, aunque aclaró que «siempre es difícil traer una orquesta»; no obstante, el director se mostró «encantado» ante esta posibilidad.