"El invierno oscuro" del escritor santanderino Julián Ibáñez se alzó ayer con el Premio Rejadorada de Novela Breve en su cuarta edición, tal y como dio a conocer el presidente del Jurado, Luis Mateo Díez. Ibáñez resultó ganador de entre 300 obras presentadas de diecinueve países, de las cuales seis fueron finalistas.
Según aseguró Díez, el Jurado valoró los elementos de «intriga y tensión narrativa» de la novela, ambientada en el mundo etarra, que tiene como protagonista a «un chico» joven que cumple funciones de vigilancia dentro de la kale borroka. En definitiva, añadió, «es una reflexión sobre la violencia», que cuenta con un desarrollo dramático «cercano a la novela negra».
Para el Jurado, la novela está «escrita con mucha eficacia» y con la técnica propia de quien maneja el género de la novela negra. En ella, además, «subyace cierta reflexión crítica sobre este universo de violencia».
Para el poeta y delegado de La Razón en Castilla y León, Jesús Fonseca, se trata de «una novela muy realista» que «desnuda» de manera muy real y verosímil la violencia. En términos parecidos se expresó el periodista Agustín Remesal, quien además valoró que el premio esté organizado por una entidad privada, al tiempo que valoró la alta participación de los escritores en la convocatoria.
En este sentido, Luis Mateo Díez se congratuló de la «consolidación» y el «prestigio» alcanzado por el premio tras sus cuatro ediciones. Algo que para Fonseca es una muestra de lo que «la sociedad civil puede hacer por la promoción de la cultura», subrayó.
El ganador del Premio Rejadorada de novela corta, Julián Ibáñez, explicó tras conocer que su trabajo había sido reconocido por el Jurado, que la novela ganadora «es la unión de dos cuentos juveniles, donde el protagonista, un joven que vive en Euskadi, habla de su situación con una mirada no exenta de humor».
Este premio, patrocinado por la bodega Rejadorada, de Toro, está dotado con 6.000 euros y la publicación de la obra por parte de la editorial Multiversa.
El Jurado, presidido por Mateo Diez, estuvo integrado también por Jesús Fonseca, Ernesto Escapa, Manuel Cambronero y Agustín Remesal, hermano del presidente de la empresa propietaria de la bodega, Luis Remesal.
Con la convocatoria del Premio Rejadorada de Novela Breve, la bodega toresana pretende «impulsar la creación literaria». Y además contribuir «a poner de manifiesto el espíritu compartido por los creadores de la palabra y de la enología, pues en ambos placeres subyacen análogos valores culturales». Del mismo modo, esta bodega quiere homenajear «a los buenos escritores y participar en el patrocinio y difusión de su obra, filosofía esta que igualmente sostiene el esfuerzo por crear y difundir la cultura de nuestra denominación de origen hasta el ámbito internacional».