Las lluvias caídas ayer en la Denominación de Origen Toro no afectarán de momento a la calidad de la uva, si no persisten, para la cual sigue habiendo unas previsiones excelentes. El presidente del Consejo Regulador Amancio Moyano, dijo ayer «que sólo si continuase lloviendo podría aparecer algo de botitrys», aunque todo indica que habrá una mejoría meteorológica a mediados de semana. La Bodega Mauro II, la única que ha comenzado a vendimiar, ha tenido que paralizar su actividad con las lluvias, aunque entre el sábado y el domingo recogió 20.000 kilos de uvas en viñedo viejo. Las lluvias también retrasarán el inicio de la recolección en algunas bodegas que tenían pensado hacerlo esta semana. También el agua provocará una reducción del grado alcohólico, como señaló ayer Amancio Moyano. Hay que recordar que se espera una reducción de la cosecha de uva de un 40% con respecto al pasado año, debido a la climatología, aunque esta circunstancia no va afectar a la calidad, que se prevé muy buena. El pronóstico es que la vendimia esté a pleno rendimiento a finales de este mes o primeros de octubre, según ha anunciado el Consejo Regulador con anterioridad.