Tres agentes de la Guardia Civil resultaron ayer heridos leves en la concentración convocada por las cuatro organizaciones agrarias de la región (Coag-Zamora, UCCL-Coag, Asaja y UPA) a las puertas de la fábrica de García Baquero de Toro contra la rebaja de precios que pretende imponer la industria láctea.

El acto de protesta, el último de los cuatro convocados en diferentes puntos de la región, logró concentrar a medio millar de ganaderos de Castilla y León, que arribaron hacia las doce del mediodía en la explanada de la fábrica, donde se encontraron con una fuerte presencia de fuerzas de las Guardia Civil. En concreto, alrededor de una veintena de vehículos de este cuerpo se apostaban en diferentes lugares del edificio y unos cuarenta agentes de la Unidad Especial protegían la entrada al mismo tras una valla. Los manifestantes, en medio de una gran algarabía propiciada por pitidos y una gran cantidad de petardos, comenzaron por derramar leche contra la verja de entrada y también se lanzaron algunas piedras contra los agentes de seguridad, aunque el blanco preferido fue la caseta de vigilancia de la fábrica, en cuyo interior se encontraban dos empleados. Ambos tuvieron que abandonar su puesto, protegidos por miembros de la Unidad Especial, tras romper los manifestantes los cristales de la caseta e introducir en su interior un neumático ardiendo; uno de los que se habían utilizado para hacer una fogata justo debajo del cartel en el que se informa de la inversión concedida por la Junta a la firma García Baquero para la construcción de la factoría toresana. Un aspecto contra el que los ganaderos dirigieron algunos de los eslóganes de la concentración: "García Baquero, has venido a Castilla y León a llevarte la subvención", puesto que se quejan de que la industria compre al menos el 20% de la leche en Francia cuando el 45% de la inversión de la fábrica de Toro ha sido financiada por el Ejecutivo Regional. Precisamente el «riesgo» que corrían los vigilantes de la cabina ha sido el argumento esgrimido por el Subdelegado de Gobierno, Carlos Hernández, para justificar la carga efectuada por las fuerzas de la Unidad Especial cuando los manifestantes emprendían el camino hacia la autovía con la intención de cortarla. Los botes de humo lograron en un primer momento dispersar a los ganaderos, aunque finalmente consiguieron cortar la A-11 durante veinte minutos, provocando algunas colas de vehículos. Posteriormente se trasladaron de nuevo a la explanada de acceso a la fábrica, donde fueron leídos los manifiestos y se dio por finalizado el acto de protesta pasadas las dos de la tarde. Entre medias, los bomberos de Toro tuvieron que personarse en el lugar para sofocar el incendio provocado en los palets de la fábrica de cerámica Cuesta Vila que se encuentra situada en frente de García Baquero. De momento se desconoce si ha presentado algún tipo de denuncia. Quien si lo ha hecho, tal y como ha confirmado el Subdelegado de Gobierno, ha sido García Baquero, por los daños causados en las instalaciones, ya que, además de la cabina de vigilancia, los manifestantes rompieron la verja de la entrada.

Las organizaciones agrarias, por su parte, han criticado la «fuerte presencia » de las fuerzas de seguridad en el acto de ayer, a la que consideran «una provocación», a la vez que han calificado de «desproporcionada e injustificada» la carga policial del pasado lunes en Valladolid, donde un ganadero resultó herido.

El subdelegado de Gobierno «lamenta» los destrozos en la quesería

El Subdelegado de Gobierno de Zamora ha «lamentado» la actuación de algunos manifestantes que lanzaron piedras contra los agentes y provocaron destrozos en la fábrica , a la vez que «felicita a los dirigentes sindicales, que lograron mantener la calma» y a los agentes de la Guardia Civil, «que evitaron que los incidentes fueran a más». Carlos Hernández cree que «se debe coordinar el derecho a manifestarse con el resto de derechos que implican respetar la propiedad privada».

Las organizaciones agrarias, sin embargo, han anunciado ya que «si la industria no rectifica volveremos a la calle con la máxima contundencia», como señaló Donaciano Dujo, presidente de la regional de Asaja. Por su parte, la Coordinadora Agraria de Castilla y León planteó ayer en el seno nacional de la formación la convocatoria de movilizaciones en todo el país «si las empresas del sector mantienen sus decisiones unilaterales de bajar los precios».