Asesinato

Condenada a 20 años de cárcel por asesinar a su pareja, que estaba enfermo

La víctima fue asesinado por asfixia introduciéndoles bolsas de plástico en la boca y fijándolas en el interior con cinta adhesiva transparente

La Audiencia Provincial de Madrid.

La Audiencia Provincial de Madrid. / Carlos Luján / EP

EFE

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a 20 años de cárcel a una mujer que asesinó a su pareja en el transcurso de una discusión "prevaliéndose del estado de debilidad física y precario estado de salud" de la víctima, lo que le impidió defenderse de ella, que le asfixió introduciéndole bolsas de plástico en la boca.

La sentencia de la Sección 23 de la audiencia madrileña, a la que ha tenido acceso EFE, sigue el veredicto del jurado popular que enjuició el caso en noviembre, y que consideró a Verónica C.H. culpable de asesinar al que era su pareja, quien presentaba un deterioro constitucional severo, cardiopatía isquémica revascularizada mediante triple by-pass y antecedentes de VIH, además de varias fracturas como consecuencia de un accidente de tráfico, por lo que necesitaba muletas para andar.

La Fiscalía pedía para ella 22 años de cárcel por un delito de asesinato con la agravante de parentesco, mientas que la defensa pidió su absolución y, subsidiariamente, que fuera condenada a 3 años y 6 meses de prisión por homicidio con las atenuantes muy cualificadas de drogadicción y dilaciones indebidas.

Ahora la Sala condena a la acusada por asesinato, ya que quiso matar a la víctima, que no pudo defenderse, y no queda probado que su adicción a las drogas incluyera en su capacidad para saber lo que hacía.

Subraya la Sala, como dijo el jurado, que la acusada y la víctima eran pareja sentimental con convivencia desde hacía varios años, no siendo cierto que ella solo acudiera a la vivienda de él porque le daba dinero y droga a cambio de sexo, como ella aseguró en el juicio.

Según el relato de la sentencia, la acusada discutió en varias ocasiones con la víctima desde el día anterior al suceso, el 3 de marzo de 2018, cuando actuó "prevaliéndose del estado de debilidad física y precario estado de salud de Francisco, y el estado de intoxicación que le privaba de toda capacidad de reacción necesaria para repeler el ataque", y con la intención de "acabar con su vida".

Así "taponó la boca de Francisco, introduciéndole varias bolsas de plástico, fijándolas en el interior con cinta adhesiva transparente, ocluyendo la boca y nariz, impidiéndole respirar", causándole la muerte.