La Audiencia Provincial de Huelva ha condenado a un hombre a 10 años y tres meses de prisión por maltratar a la que fuera su pareja sentimental, a la que amenazaba, acosaba e incluso de la que llegó a abusar sexualmente, así como causar daños en su lugar de trabajo en el que provocó un incendio.

La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, considera probado que el acusado comenzó una relación con la mujer aproximadamente en 2016, y tras un primer año en el que la convivencia fue buena, comenzó un control férreo sobre ella controlándola en sus salidas y relaciones, vigilándola, insultándola y sometiéndola a vejaciones, y llegándola a amenazar de muerte.

Sobre la segunda quincena de enero de 2020, la situación se volvió cada vez más insostenible y el 14 de febrero tras aceptar ella salir a cenar por el día de los enamorados para evitar discusiones, el acusado le propuso mantener relaciones sexuales y, pese a la negativa de la mujer, él la forzó.

Al día siguiente ella le manifestó su intención de terminar la relación.

Durante los días siguientes y hasta que se produjo el confinamiento por la pandemia de la covid, la mujer vivió en una situación de "miedo constante" ante el temor que le causaba el procesado, quien persistiendo en sus amenazas, se presentaba en su puesto de trabajo a diario o la acechaba en su domicilio, teniendo ella que cambiar su forma de vida e incluso irse a vivir una temporada con su hermana.

El 5 de mayo del 2020, cuando la mujer se reincorporó a su puesto de trabajo el acusado reanudó su acoso y hostigamiento y diez días más tarde, tras haber estado en una celebración, el hombre acudió a ese lugar con una botella de plástico que contenía gasolina, vertiendo su contenido en un expositor prendiéndole fuego y ocasionando un incendio que hubo de ser apagado por un vigilante de seguridad con un extintor y que causó daños por 7.692,49 euros.

La sentencia considera a este hombre responsable de un delito de maltrato habitual por el que le impone dos años de cárcel, de otro de abuso sexual por el que suma siete y de un tercero de daños, por el que añade un año y tres meses.

Se le condena también como autor de un delito de amenazas contra la mujer y otro de acoso a 103 días de trabajos en beneficio de la comunidad.

Asimismo, se le imponen distintas prohibiciones de alejamiento a menos de 500 metros y comunicación con la perjudicada que suman 21 años en conjunto y la medida de cinco años de libertad vigilada una vez cumpla la pena de prisión.

En concepto de responsabilidad civil debe indemnizar a la mujer con 6.000 euros por daño moral y al dueño del establecimiento incendiado con 7.692,49 euros.