Agentes de la Unidad de Atención a la Familia y la Mujer (UFAM) de la Jefatura Superior de Policía de Valencia centran su investigación sobre la violación grupal de seis hombres a una mujer ocurrida hace una semana, tal como adelantó ayer en exclusiva Levante-EMV, medio que pertenece al mismo grupo editorial que este diario, en identificar a los sospechosos. Fuentes policiales han confirmado que, de momento, no se han producido detenciones, ya que el primer paso es identificar, localizar y detener a los sospechosos para poder tomarles declaración.

De momento, existen poco datos acerca de la identidad exacta de los denunciados, aunque la Policía dispone de imágenes y datos que permiten poder llegar a identificarlos a través de distintas gestiones. Otra de las dificultades es que algunos de ellos podrían haber cambiado de domicilio tras los hechos, por lo que todas las gestiones se centran en su localización.

La agresión sexual en grupo, en la que participaron seis hombres de mediana edad a quienes la víctima conocía desde hacía apenas unos días, se produjo en la tarde del pasado 3 de enero, en el lugar donde residen los presuntos agresores.

Según ha podido saber este diario de fuentes jurídicas, además de agredirla sexualmente mientras la tenían acorralada y retenida en una de las viviendas, varios de los ahora investigados se mofaron de la discapacidad psíquica de la mujer, que tiene 39 años de edad. Durante la brutal violación, también la humillaron, insultaron y amenazaron.

De hecho, los especialistas en agresiones sexuales de la UFAM de València no solo los buscan por un presunto delito contra la indemnidad sexual, sino que, además, les imputarán otro de amenazas graves.

La acusación se basa en la denuncia interpuesta por la mujer en la que asegura que la amenazaron durante la agresión sexual, pero también en los días siguientes, llegando a decirle que le enviarían un grupo de sicarios para acabar con ella y con su pareja si se atrevía a recurrir a la Policía.

Abusos continuados en el tiempo

El temor a que cumplieran con esas amenazas es lo que, según las fuentes citadas, la llevó a callar durante días lo ocurrido. De hecho, la mujer solo acudió a la Policía después de que varios de los sospechosos agredieran a su pareja sentimental cuando este les recriminó lo que le habían hecho a la mujer.

Tal como informó ayer este periódico, la mujer denunció que, antes de la violación grupal en la que participaron seis hombres, estuvo sufriendo abusos sexuales por parte de uno de ellos quien aprovechaba sistemáticamente la ausencia de su pareja para acercarse a ella y someterla a tocamientos y otro tipo de ataques sexuales.

En ese caso, la mujer optó por guardar silencio porque el agresor la amenazaba y porque temía por ella y por su pareja. Finalmente, cuando se produjo la violación en manada y los presuntos agresores sexuales atacaron al compañero sentimental de la víctima fue cuando esta, asustada, llamó al 112 y pidió ayuda policial. Un coche patrulla acudió y la atendió, lo que favoreció el inicio de la investigación que siguen ahora los especialistas de la UFAM de València.