Una multa de 1.620 euros. Es la pena que el Juzgado de Lo Penal N.º 2 de Murcia impuso a un joven por abusar sexualmente de una chica en una discoteca de Murcia. El chico recurrió ante la Audiencia Provincial, que desestimó su recurso y confirmó la sentencia.

Los hechos que se consideran probados tuvieron lugar en un establecimiento de ocio de la zona de Atalayas, en la capital murciana, sobre las tres de la mañana, en un palco. El chico se abalanzó sobre la mujer, la agarró de la cintura, intentó besarla en el cuello y la sometió a tocamientos en los glúteos. La víctima pudo zafarse y tres días después denunció los hechos ante la Policía Nacional.

En su recurso, el joven admitió que él había tenido una pelea con el novio de esa chica, y reconoció haberle hecho destrozos en su coche: le rompió los retrovisores. Desde su punto de vista, la denuncia por abuso vino precisamente “por venganza”. También sostiene que cómo es posible que en aquel palco hubiese catorce personas y ninguna de ellas viese nada o actuase en consecuencia, saliendo en defensa de la víctima en aquel momento.