La fiscalía ha pedido tres años de prisión para una mujer que será juzgada esta semana en la Audiencia Provincial de Murcia acusada de cobrar la pensión de su suegra, abonada por una caja de compensación suiza, hasta 18 años después de muerta, con una cuantía total percibida que supera los 79.000 euros.

Las conclusiones provisionales del fiscal, a las que ha tenido acceso Efe, piden a la sala que la condene también a devolver esa suma, tras acusarla de un delito de estafa agravada por la cuantía en concurso con un delito continuado de falsedad.

Este último lo habría cometido cuando, presuntamente, falsificó los documentos de fe de vida con los que trató de acreditar que la pensionista no había fallecido.

La caja suiza comenzó a pagar la pensión a la beneficiaria desde noviembre de 1985, lo que hacía en las cuentas que la misma le fue indicando, continuando los abonos incluso cuando esta falleció, lo que ocurrió en enero de 1998.

La entidad pagadora no tuvo conocimiento de la muerte hasta enero de 2016, cuando tuvo noticia de ello a través del Ministerio de Justicia de España.

La fiscalía también señala que el importe de la pensión era, inicialmente, de 240 euros mensuales, para terminar siendo de 430.