La Policía Nacional de Burgos ha detenido a un joven de 18 años, F. C.G, de 18 años, como presunto autor de simulación de delito tras haber denunciado que le habían secuestrado y agredido, y todo ello para tratar de ocultar así a su familia una pelea que había mantenido con unos conocidos, según informaron a Europa Press fuentes policiales.

En la denuncia que formalizó en la Comisaría Provincial contó que una tarde, al salir del domicilio de un familiar, le había abordado por la espalda un individuo extranjero, el cual, tras amenazarlo, le obligó a subir a un vehículo ocupado por otros dos hombres.

Según sus manifestaciones, y una vez en el interior del coche, le golpearon repetidamente haciendo que perdiera la consciencia que recuperó minutos más tarde en un descampado, rodeado esta vez de cinco personas, las cuales continuaron agrediéndole e insultándole, hasta que en un descuido de ellos consiguió escapar y solicitar ayuda.

Tras esa llamada se desplazó hasta el lugar un indicativo policial y una ambulancia que le atendió y trasladó al hospital.

La "víctima" no escatimó en detalles con respecto a las características físicas, apodos y armas utilizadas por sus agresores, incluyendo la vinculación de estos individuos con bandas latinas, esgrimiendo la rivalidad entre estas como argumento para explicar la paliza que le habían propinado.

Días más tarde, y previamente citado en dependencias policiales por los investigadores para tratar de concretar detalles y datos relativos al suceso, el denunciante se mostró nervioso, respondiendo de manera poco creíble a preguntas concretas.

Finalmente, acabó por reconocer que se había inventado todo lo ocurrido, con objeto de ocultar su ausencia del domicilio familiar y que no se enteraran de una pelea que había mantenido con unos conocidos.

Tras esta declaración fue detenido por incurrir en un presunto delito de simulación de delito, siendo informado de los derechos que le asisten amparados por la legislación vigente.