Agentes de la Policía Nacional han detenido a un hombre de 30 años de edad que en la madrugada de ayer estaba maltratando a su perro en Gijón y que acometió a los agentes que intentaban proteger al animal. Incluso el arrestado llegó a instigar al can para que atacara a los policías, logrando que mordiera a uno de ellos en la pierna.

Los agentes recibieron de madrugada el aviso de una transeúnte que había visto a un hombre golpeando a su perro y, al llamarle la atención sobre su actitud, se había puesto muy violento y había querido agredirla. En la calle Carmen los policías observaron al individuo dando patadas al perro que le acompañaba. Sólo se detuvo ante los insistentes requerimientos de los policías para que cesara en su agresión.

En ese momento se comprobó que el animal no tenía heridas abiertas que requirieran cura urgente, pero se solicitó la presencia del lacero municipal para su protección y traslado a un albergue municipal. Ante ese requerimiento, el dueño se alteró y acometió violentamente a los agentes, azuzando también a su can para que atacara a los policías. El animal, obedeciendo las órdenes de su dueño, se abalanzó sobre uno de los policías y le mordió en la pierna, a la altura del gemelo izquierdo. Los agentes desplazados hasta el lugar de los hechos pudieron contener al animal con mucho esfuerzo, y lograron meterlo en el vehículo policial hasta la llegada del lacero.

Los policías de la Brigada de Seguridad Ciudadana de Gijón lograron reducir y detener al amo del perro, que se enfrentó física y verbalmente a los funcionarios. El arrestado contaba con 12 detenciones anteriores por amenazas, atentado y malos tratos en el ámbito familiar. Pasó esta mañana a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia.