El bebé por cuyas lesiones fueron detenidos el pasado día 5 sus padres en Oviedo falleció anoche en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) de la capital del Principado, donde se encontraba desde entonces ingresado en estado crítico, han informado a Efe fuentes de la investigación.

El Juzgado de Instrucción número 4 de Oviedo, a petición de la Fiscalía, acordó el pasado día 7 la puesta en libertad provisional con la obligación de comparecer los días 1 y 15 de cada mes a la pareja detenida por presuntas lesiones graves a su hijo de 54 días.

También a petición de la Fiscalía el Juzgado decretó la suspensión cautelar del ejercicio de patria potestad para la mujer en relación a sus tres hijos (el bebé fallecido, una niña gemela suya y un hermano mayor, de 9 años), así como el alejamiento y prohibición de comunicación con los menores.

En su declaración la mujer exculpó a su pareja de cualquier relación con los hechos, según informó la Fiscalía.

Con respecto al hombre, el Juzgado acordó la suspensión cautelar de la custodia de los menores, igualmente a solicitud del Ministerio Público.

La pareja fue detenida en Oviedo tras el ingreso en estado crítico en el HUCA del bebé por las lesiones que sufrió en Gijón, donde se encuentra el domicilio familiar.

El bebé, que nació junto a una niña en un parto gemelar el día 10 del pasado mes de enero, fue hospitalizado en el HUCA tras ser trasladado desde el centro sanitario de Cabueñes, en Gijón, al que había sido llevado por sus padres el día 5.

Ante la gravedad de las lesiones que sufría el pequeño, los servicios médicos de Cabueñes le derivaron al HUCA, donde ingresó a a las 23:25 horas de ese día, centro hospitalario en el que apenas una hora más tarde fueron detenidos sus progenitores.

El padre y la madre del bebé, de 30 y 40 años, no cuentan con antecedentes de denuncias previas por malos tratos, ni entre la pareja ni otra relacionada con los niños.

Mientras el matrimonio era detenido en Oviedo, efectivos policiales y del Centro de Salud de La Calzada acudieron al domicilio familiar, en el que no se encontraba nadie, y los vecinos informaron de que la bebé y su hermano mayor, de 9 años, habían sido recogidos por sus abuelos paternos, quienes les habían llevado a su casa.

La abuela paterna, que ayudaba en las tareas domésticas al matrimonio detenido, fue quien animó a la madre del menor a acudir al médico para consultar su estado de salud.

Así, la mujer telefoneó a su marido, con una jornada laboral de 7 a 21 horas, y ambos se desplazaron con el bebé al hospital de Cabueñes.