A golpes de martillo murió ayer una mujer de 34 años natural de la localidad zamorana de Toro.

La toresana murió ayer como consecuencia de los martillazos recibidos presuntamente a manos de su pareja en la localidad coruñesa de Ponteceso, según informaron fuentes de la Guardia Civil del municipio, que investigan el caso. El alcalde del municipio, José Luis Fondo, explicó que la mujer tenía 34 años y el detenido, 54.

El regidor indicó que la pareja tiene dos hijos en común, uno de 11 años -que tiene una discapacidad-y otro de cinco y que, de hecho, las alarmas saltaron cuando nadie fue a recoger al más pequeño al colegio y la cuidadora dio el aviso. El cuerpo sin vida de la mujer, natural de Toro (Zamora), fue encontrado en el piso que compartía con el hombre.

El alcalde precisaba ayer que no constan denuncias previas por malos tratos ni orden de alejamiento, un extremo que ratificaron fuentes policiales a «Europa Press».

Las mismas fuentes indicaron que, según los primeros indicios, la muerte se produjo tras recibir la víctima varios golpes con un martillo en la cabeza. Asimismo, el alcalde de Ponteceso agregó que la mujer llevaba 15 días viviendo con otro hombre, algo que provocó los celos de su anterior compañero. Según relató el regidor del municipio, la víctima y su presunto asesino llevaban unos cuatro años viviendo en Ponteceso, aunque él es natural de A Coruña y ella lo era de la localidad zamorana de Toro. Ambos compartían un piso que ayer miércoles habían quedado en entregar a la casera, para lo que los tres se citaron a las 12.00 horas.

Tal y como señaló el alcalde, la casera vio a la pareja por la mañana en actitud «pacífica», pero posteriormente el cuerpo fue encontrado en esa misma vivienda, en la que él deseaba seguir viviendo.

La pareja tiene dos hijos menores, uno de cinco años de edad y otro de 11, que tiene una discapacidad y que, de hecho, recibe asistencia del Ayuntamiento. Fuentes policiales informaron de que no constan denuncias previas por malos tratos. El presunto autor del crimen fue detenido y la Policía investiga ahora lo sucedido.

De confirmarse que se trata de una muerte por violencia de género, la zamorana sería la víctima mortal número 49, tras el fallecimiento el pasado martes de otra mujer en Oviedo. Johana Toaza, ecuatoriana de 27 años, murió el martes en Oviedo degollada y quemada por su ex pareja.