Madrid.- La Policía Nacional, tras meses de investigaciones, ha desarticulado una banda que se dedicaba a robar en joyerías y bancos utilizando incluso la violencia contra empleados y agentes de seguridad si eran sorprendidos. Aunque tenían su base en Madrid, habían operado también en otras zonas de la península. Concretamente a los seis integrantes de la organización se les atribuye ocho atracos en Madrid, Barcelona, Valladolid y Oviedo con los que consiguieron un botín de unos 226.000 euros.

Las investigaciones se iniciaron en el mes de octubre cuando se detectó un aumento de los robos en joyerías de Madrid cometidas por personas de origen colombiano y que operaban siempre en establecimientos de lujo.

Estos delincuentes conseguían su propósito accediendo al establecimiento progresivamente de uno en uno y disimuladamente ocupando sitios estratégicos en el local para localizar los fondos y las piezas de más valor. Una vez hecha esta prospección, mientras uno o dos de los integrantes de la banda distraía a los dependientes, el resto accedía a los cajones o vitrinas y se apoderaba del dinero y las joyas.

Si eran sorprendidos no dudaban en utilizar la violencia contra los empleados o los vigilantes de seguridad con los que forcejeaban e incluso agredían con la finalidad de apoderase del botín y evitar su detención. Algunas veces actuaban incluso contra los clientes cuando operaban en sucursales bancarias. En este caso les abordaban una vez habían retirado de sus cuentas una cantidad importante de dinero.