Juana Rivas consigue evitar la entrega de su hijo menor a su expareja en Italia

La jueza ha escuchado esta misma noche al hijo menor de Juana Rivas y ya ha anunciado su decisión: le concede la medida cautelar. La defensa de la granadina ha logrado así que, por el momento, Daniel no regrese a Italia con su padre.

Esta medida se adopta exclusivamente para la protección con carácter de urgencia del niño y de forma temporal, mientras se traslada la cuestión al Juzgado competente y este resuelve. El Juzgado de Guardia ha acordado la inhibición en favor del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Granada, al que se ha inhibido en el Juzgado de Primera Instancia número 10 de Granada.

Así lo ha comunicado el equipo jurídico de Rivas, que ha estado todo el martes intentando agotar cualquier vía judicial posible para impedir que Daniel, el hijo de 10 años de Rivas y Francesco Arcuri, vuelva con su padre a Italia como exigía la justicia italiana. Ha sido un trabajo ha contrarreloj después de que el Tribunal de Cagliari, que decide sobre la custodia del niño que la granadina tiene con su expareja, al que acusa de infligir "malos tratos" y situar en "peligro" al menor, haya determinado que el menor tenía que volver, como tarde, este miércoles con su padre, que ostenta la custodia.

Testimonio de especial importancia

El equipo jurídico de Juana Rivas explica que el testimonio de Daniel, "que ha sido solicitado no solo por la defensa, sino también por la Fiscalía, ha resultado de especial importancia para que se adopte esta decisión". 

"Supone un hito esencial en el procedimiento porque por primera vez se ha escuchado al menor", aseguran en un comunicado en el que inciden en que "por fin se está actuando en base a su interés superior", "que es lo que esta parte ha solicitado desde el inicio de este procedimiento".

En el auto dictado, al que ha tenido acceso este periódico, la instructora asegura que el relato del menor es "serio y convincente", en el que expresa "la situación de temor por su seguridad y peligro extremo para su integridad física que siente padecer en caso de retorno con su padre".

Periplo judicial

El equipo jurídico de Rivas, que celebra esta medida temporal, había pedido medidas para proteger a Daniel. Para ello, se personaron en el Juzgado de Primera Instancia Número 10 de Granada, solicitando la "comparecencia urgente y escucha del menor, por parte de la jueza titular del mismo". Pero el juzgado no se consideró competente para dictar medidas de protección del niño y se inhibió al Juzgado de Violencia sobre la Mujer Número 2 de Granada. Con su magistrada titular de vacaciones, y sin haber recibido aún el expediente para ser examinado, este juzgado archivó la causa.

Finalmente, y tras un escrito presentando por la Fiscalía en el que solicitaba que Daniel fuera escuchado, la jueza del Juzgado de Guardia de Granada tomó declaración esta misma noche, y por primera vez en España, al menor de 10 años.

El Ministerio de Juventud e Infancia también había solicitado a la Unidad de Menores de la Fiscalía General del Estado que protegiera al niño. En un escrito elaborado por la cartera que lidera Sira Rego se señalaba que el hecho de que Daniel tuviera que regresar al domicilio de su padre en Italia este miércoles 8 de enero, como había solicitado la justicia italiana, "podía suponer una clara vulneración de los derechos fundamentales de las personas menores de edad al no atender al interés superior del menor". Por eso, trasladaban la urgencia de que Daniel sea oído por un órgano judicial en España o por la propia Fiscalía.

Solo unos minituos después de que se conociera que Daniel puede permanecer en España, Rego ha puesto en valor la noticia: "Daniel ha sido escuchado. Ha podido explicar lo que vive y por qué siente miedo. Daniel por ahora se queda. El alivio que sentimos hoy no borra su sufrimiento, ni el de su madre Juana Rivas, ni el de su hermano Gabriel", ha escrito en sus redes sociales.