Vídeo viral

La 'discoteca' del polémico 'perreo' adolescente en Barcelona, pendiente de cierre por falta de licencia

El local de Sants, Pampara, solo tiene permiso para albergar oficinas pero acogió una fiesta para menores subida de tono

Entrada de la discoteca Pampara.

Entrada de la discoteca Pampara. / ZOWY VOETEN

Meritxell M. Pauné

La discoteca Pampara de Barcelona, convertida en fenómeno viral este martes por una escena de perreo adolescente subida de tono, está pendiente de cierre por falta de licencia. El espacio situado en la avenida de Madrid 136-138 es en realidad un local con licencia de oficina no abierta al público. Está expedientada tras suspender dos inspecciones de la Guardia Urbana.

El Ayuntamiento de Barcelona confirma a El Periódico que tiene abierto “un expediente de cese de la actividad” contra este local, que se comercializa bajo el nombre de Associació Oasis Cultural. La policía local revisó estos bajos en mayo y en junio de 2022 y detectó varios incumplimientos de la normativa, entre los cuales constató que albergaba actividades diferentes de la autorizada. Legalmente solo puede destinarse a trabajo de oficina, sin libre concurrencia ni dar servicio a la industria.

La consecuencia directa de las inspecciones suspendidas es la orden de cierre. Este procedimiento no es inmediato, puesto que la parte afectada tiene plazos para presentar alegaciones y el consistorio también dispone de un periodo para valorarlas. Si finalmente no se aceptan se procede a la clausura del local.

La complejidad de tener permiso

La patronal del ocio nocturno, Fecalon, asegura que la noticia del perreo viral le sorprendió porque no tenía “constancia” de ninguna discoteca ni sala de fiestas en esta ubicación y mucho menos con permiso para acoger actividades destinadas a menores de 18 años. De hecho, recuerdan, la gran dificultad para obtener nuevas licencias de discoteca en Barcelona ha hecho que no haya ninguna discoteca para menores en la capital y proliferen las celebraciones clandestinas sin garantías. “Para acoger sesiones para menores hay que tramitar un permiso adicional, disponer del seguro apropiado, pasar revisiones del local sobre venta de alcohol y salidas de emergencia por ejemplo…”, enumera una portavoz de la entidad en declaraciones a este medio.

La ausencia de licencia, que ha avanzado La Vanguardia, se suma a la polémica surgida la víspera por las escenas de baile muy sexualizado en esta fiesta de tarde para adolescentes. Un vídeo publicado en TikTok por los organizadores y con más de dos millones de visualizaciones mostraba a un grupo de chicas de entre 14 y 17 años 'perreando' agachadas y de espaldas a un hilera de chicos, que simulaban un coito. Educadoras, psicólogas y críticas culturales consultadas por El Periódico, del grupo Prensa Ibérica, han analizado la polémica y reflexionan sobre los clichés que tramite la escena. Reivindican la urgencia de una educación sexual para los menores que les de herramientas adecuadas para vivir conscientemente la hipersexualización de la cultura urbana.