Un tercio (un 32%) de los agresores sexuales de niños y adolescentes son también menores de edad. Y el 87% de las víctimas son mujeres. Son cifras hechas públicas este martes por la Unidad de Atención a las Violencias hacia la Infancia y la Adolescencia del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, el llamado Equipo EMMA. "Cada vez más esta problemática se da entre personas de la misma edad y afecta sobre todo a las niñas. Es un problema en alza", ha advertido José Manuel Domínguez, el subdirector asistencial del hospital. Los médicos reclaman instaurar la educación afectivo-sexual a partir de los 3 años.

Este es el segundo año de la puesta de esta unidad, en la que trabajan dos pediatras, tres trabajadoras sociales, dos psicólogas clínicas y una secretaria de equipo. Desde noviembre de 2021 a octubre de 2022, el Equipo EMMA atendió a 341 niños y/o adolescentes (frente a los 307 del año previo) que habían sido víctimas de algún tipo de violencia.

El 79% de esta violencia fue sexualpero para valorar este dato hay que tener en cuenta que el equipo EMMA es el dispositivo referente para niños y adolescentes víctimas de violencia sexual en Barcelona ciudad). Otro 15,5% había padecido violencia física y un 3%, negligencia en su cuidado. La mayoría de los casos derivaban de los servicios sanitarios y de la escuela. Un 53% de las familias decidieron denunciar.

El perfil: una niña de 13 años

El perfil mayoritario de una víctima de violencia sexual es el de una niña de 13 años: el 87% de las personas menores de edad que la sufren son niñas. "Recientemente hemos detectado un importante porcentaje de las agresiones entre iguales, especialmente en los adolescentes, pues un tercio de los agresores son menores de edad. Esto no quiere decir que un tercio de los adolescentes sean agresores ni que hayamos detectado un aumento de las agresiones entre adolescentes, pero es un dato que hay que analizar", ha apuntado Anna Fàbregas, adjunta del Servicio de Pediatría y coordinadora del Equipo EMMA. Las cifras recogidas por Vall d'Hebron coinciden con las analizadas en la literatura médica.

¿Qué lleva a un menor de edad a agredir sexual o físicamente? Según la psicóloga clínica de la unidad Mireia Forner, hay diferentes factores. "Impulsividad, poca empatía, dificultad en la regulación emocional", ha señalado. "Hay una falta de educación afectivo-sexual en niños y adolescentes", ha añadido. Junto a ella, la trabajadora social Giuliana Ríos ha dicho que esta materia debería instaurarse en el sistema educativo "a partir de los tres años". "Creemos que sería lo más apropiado".