La playa de Bastiagueiro, en Oleiros, registra una bandera roja, con lo que el baño está prohibido, después de recibirse el aviso de que se había avistado un tiburón en la zona. Esta situación obligó a los socorristas a desalojar a las personas que permanecían en el agua para evitar cualquier peligro, aunque esto no afectó a quienes estaban en la arena, que pudieron permanecer como hasta ese momento.