El sindicato USO ha anunciado una demanda laboral contra la compañía Ryanair por no respetar el derecho de huelga de sus trabajadores, ya que la compañía aplicó ayer el cien por cien de servicios mínimos en sus vuelos, en la primera jornada de movilizaciones. La formación sindical acusa también al Ejecutivo de no haber defendido la movilización laboral y haber permitido que la compañía dejara sin efecto los servicios mínimos establecidos.

Al quedar prácticamente anulada la movilización laboral, las protestas de los trabajadores apenas tuvieron repercusión en el tráfico aéreo del aeropuerto de Palma. Los vuelos de Ryanair, de salida o de llegada, operaron con total normalidad. Los retrasos solo se produjeron en casos muy puntuales y fueron de muy escaso tiempo. Ningún pasajero quedó en tierra como consecuencia de la movilización.

Ester Peiró, portavoz de USO, explicó que en la noche del jueves la compañía avisó a los trabajadores, exigiéndoles que acudieran ayer a trabajar porque todos los vuelos previstos habían sido declarados como servicios mínimos. La sindicalista afirmó que Ryanair no ha respetado la decisión del Ministerio de Transportes, que señaló el porcentaje de vuelos preferentes.

Los retrasos de los vuelos no fueron muy significativos. B. RAMÓN

Ryanair confirmó este viernes que únicamente el 2% de los vuelos previstos se vieron afectados por la huelga, pero no en España, sino en las movilizaciones que se habían organizado en Bélgica. Otros países donde opera la compañía, como Italia, Portugal, Reino unido, Francia o España la actividad era normal, incidiendo en el poco apoyo que tuvo esta movilización entre los trabajadores. Sin embargo, la compañía espera que este fin de semana se produzcan algunas incidencias, pero no por la huelga de sus trabajadores, sino por la movilización laboral de los empleados del control del tráfico aéreo del aeropuerto de Marsella. Los vuelos que crucen el espacio aéreo francés se pueden ver afectados por la protesta laboral.

Los trabajadores de Ryanair tienen previsto continuar con la huelga durante este fin de semana, así como los días 30 de junio y 1 y 2 de julio. Esta vez los organizadores de la movilización laboral esperan que se respeten los derechos de la plantilla y se les permita ejercer la huelga.

Los trabajadores pretenden con esta protesta que la compañía cumpla y respete los derechos laborales. También exigen que Ryanair cumpla las sentencias judiciales por las que ha sido condenada. La plantilla lucha para conseguir unas mejores condiciones laborales, que de momento la aerolínea no cumple.

La movilización no solo se desarrolla en España, sino también en otros países donde viene operando la compañía con regularidad. El sindicato USO daba ayer por hecho de que estos problemas para ejercer la huelga se traducirán en una denuncia contra Ryanair.