El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha clausurado este viernes la presentación del Plan Estratégico para la Reducción de la Obesidad Infantil (denominado 'En Plan Bien'), que prevé una reducción de la prevalencia de sobrepeso y obesidad infantil de un 25% de aquí a 2030. Tal como ha reconocido Sánchez, "se trata de un objetivo ambicioso y cuantificado" y que requiere "de muchas manos y mucha determinación", dado que no "es una tarea fácil".

La estrategia, según el presidente, está "a la vanguardia de la UE" debido a su transversalidad, dado que incorpora medidas para fomentar la alimentación saludable y el deporte, pero también el bienestar emocional y el descanso. Asimismo, prevé que se forme "una gran alianza" entre todos los sectores implicados en la salud en la infancia.

El plan contiene 200 medidas, entre las que destacan la prescripción, por parte de los centros sanitarios, de ejercicio físico en los niños; el establecimiento de tarjetas digitales de ayudas alimentarias, para favorecer la accesibilidad económica a los alimentos saludables, que son normalmente más caros que la comida procesada; la incorporación de educación sobre nutrición en los planes educativos; la apertura de los patios de los colegios en horarios no lectivos o el aumento de los espacios verdes y deportivos.

Problemas de salud

La obesidad infantil es uno de los principales problemas de salud pública a nivel internacional y se asocia, junto con el sobrepeso, con numerosos problemas de salud tanto en la infancia como en la edad adulta. Su prevalencia es tan elevada que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la considera la 'epidemia del siglo XXI' dado que conlleva problemas y costes individuales, sociales y económicos.

En Europa, el exceso de peso infantil —que incluye el sobrepeso y la obesidad— ha aumentado en las últimas décadas. Y España es uno de los países con más prevalencia. Según el último dato disponible, procedente del estudio Aladino, de la Agencia de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), 4 de cada 10 niños tienen exceso de peso —23,3% sobrepeso y 17,3% obesidad—, siendo la obesidad más frecuente entre los niños y el sobrepeso entre las niñas.

Prevalencia

En la última década, el exceso de peso de 6 a 9 años se ha estabilizado en niveles altos de prevalencia. Pero si se amplía el análisis a la edad infantojuvenil (de 8-16 años), los datos del Estudio PASOS muestran que la obesidad se ha duplicado en los últimos 20 años en el caso de las niñas y las adolescentes (5,3% frente a 10,1%) mientras que en los niños y los adolescentes la cifra permanece estable (15,9% frente al 15,1%).

Además, las estadísticas indican que el problema se agudiza en los hogares con mayor vulnerabilidad. El porcentaje de niños con obesidad se duplica en las familias con menos ingresos (23,7%) en comparación con los que tienen más ingresos (10,5%), según ha destacado en la presentación del Plan el Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil, Ernesto Gasco. Al mismo tiempo, cada vez hay más indicios de que la pandemia ha empeorado este problema de salud, especialmente en los niños en situación de mayor vulnerabilidad, debido a la reducción de la movilidad, de la interacción social y el incremento del uso de pantallas.