El sargento Mario Quirós Ruiz, de tan solo 23 años, permanece desaparecido desde la madrugada del pasado martes cuando realizaba, en el embalse de El Grado, un ejercicio del curso de buceador de asalto del Ejército en lo que respecta a la orientación con oxígeno. Diferentes grupos especiales de actividades subacuáticas de la Guardia Civil, conocidos como GEAS, de Aragón, Cataluña y Madrid están tratando de encontrarle con inmersiones y con el empleo de cámaras especiales. 

Quirós, destinado en el Regimiento de Ingenieros número 8 de Melilla, iba junto a su compañero realizando buceo nocturno cuando en un momento dado se separaron. A las 03.00 horas saltaron todas las alarmas porque no se sabía nada de él y fueron activados cuatro componentes del GEAS de Aragón con base en Huesca que tras recopilar toda la información necesaria iniciaron las primeras inmersiones. 

El sargento jefe de este grupo de especialistas, Jesús Fernández, explicó a este diario que los buceadores de la Guardia Civil realizaron un rastreo hasta los 50 metros de profundidad, que es el máximo que ellos pueden realizar con la bombonas de oxígeno. «Estamos acotando la zona con hilos guía haciendo semicírculos desde la orilla hasta la zona más cercana a la presa, que fue donde se le perdió el rastro», recalcó. 

Ante la imposibilidad de realizar una búsqueda más profunda con medios humanos, fueron activados los GEAS de Cataluña que cuentan con robots y cámaras subacuáticas que alcanzan el máximo de 70 metros de profundidad. «En el caso de que fuera divisado, serán los seis componentes pertenecientes a la Unidad de Actividades Subacuáticas (UAS) de la Guardia Civil de Madrid los que harían el descenso mediante el uso de mezcla de gases», afirmó el sargento jefe Fernández. 

En estos momentos el nivel de agua del embalse es de 439,09 metros sobre el nivel del mar, estando al 70% de su volumen máximo. La visibilidad, según el sargento jefe del GEAS Aragón, es buena y la temperatura del agua está en torno a los 6 grados, aunque en las zonas de corriente baja hasta los cuatro. 

Los familiares fueron informados de la desaparición del sargento y la Comandancia General se puso a su disposición. La víctima estaba realizando un perfeccionamiento del curso de buceador elemental de la armada. De base, los aspirantes adquieren las nociones básicas del buceo militar, conocimientos teórico-prácticos para la realización de inmersiones con aire a 50 metros de profundidad, búsquedas y reconocimientos de obra viva.