Son plantillas en 3D sinterizadas por láser y hechas con polvo de poliamida, tan livianas que apenas pesan 10 gramos y de una flexibilidad extrema para que puedan entrar en cualquier zapatilla. Y llevan incorporados unos sensores de presión que ofrecen una precisión nanométrica y tienen una memoria elástica que permite aumentar la eficiencia muscular.

Es lo último en tecnología para prevenir las lesiones en el deporte de élite y empiezan a ser utilizadas cada vez con más asiduidad por atletas como Sara Gallego o tenistas como Aliona Bolsova.

Bolsova atiende a EFE tras entrenarse en las pistas de 'greenset' el Centro Municipal Vall d'Hebron. "Las plantillas que llevo ahora son de resina, las de 3D las utilizo en competición", precisa.

Para la práctica diaria, la resina le aporta más confort al pie, pero en los partidos, Aliona utiliza las de 3D hechas de poliamida, más ligeras y que reducen la demanda muscular que necesita para pelear cada punto.

"Llevan un chip incorporado y funcionan con una aplicación en el móvil que te va marcando tus apoyos, para luego mejorar ese aspecto", explica la española, que saltó a la fama tras clasificarse para los octavos de final del último Roland Garros procedente de la fase previa.

Al acabar la sesión, Bolsova charla animadamente con su podólogo, Alberto Martínez, especialista en biomecánica y el culpable de que la de Palafrugell haya decidido probar estas revolucionarias plantillas para monitorizar su pisada.

Martínez, que lleva una década cuidando los pies de la 115 del ránking mundial, le ha traído hoy unas nuevas plantillas de foam, con sensores de presión incorporados, para que las utilice también durante los entrenamientos.

"Las plantillas que lleva Aliona hace dos años que las empezamos a implantar. La tecnología no para de evolucionar y actualmente estamos introduciendo pruebas con otro tipo de sensores para intentar conseguir que el gesto deportivo mejore aún más", afirma.

La misión del podólogo es conseguir "que el rendimiento deportivo aumente, las deformaciones en los pies no aparezcan y las lesiones disminuyan, trabajando en equipo con los técnicos, dietistas y preparadores físicos para cumplir los objetivos", explica Martínez.

Y para ello, qué mejor que la ayuda de la tecnología, que actualmente permite incorporar en las plantillas casi cualquier cosa, como por ejemplo un GPS, que registra la velocidad y la distancia recorrida por el deportista.

"Llevo años tratándome con Alberto, y siempre he intentado aprovechar los nuevos materiales y las nuevas tecnologías para mejorar mi rendimiento y solucionar y prevenir lesiones. Ahora, con las nuevas plantillas, puede ver en tiempo real las presiones, y eso podemos aprovecharlo para trabajar, con él y mi fisio, las zonas que necesitan más cuidados", afirma Aliona Bolsova.

Los datos que se pueden obtener con estos tipos de plantilla son diversos. "Si las presiones por la pisada son o no correctos, si existe riesgo de lesión por un exceso de presión en determinadas áreas... y toda esta información se descarga en una aplicación móvil", apunta su podólogo.

Pero Alberto Martínez detalla que esta tecnología no solo es exclusiva de los deportistas de élite, sino que tiene otras aplicaciones médicas: "También resulta muy útil para las personas mayores que pueden tener problemas de diabetes y, por tanto, riesgo de sufrir una úlcera por un exceso de presión en determinados puntos. E incorporar en las plantillas un GPS nos permite a ayudar, por ejemplo, a personas con Alzheimer, monitorizando también su geolocalización".

El próximo paso, explica Martínez, será "conseguir que todo el circuito de sensores esté englobado dentro de la impresión en 3D de la plantilla".

Para darlo, a principios de año, su consulta empezará a trabajar con Eurecat-Centro Tecnológico de Cataluña, que recientemente ha inaugurado una planta de plastrónica pionera en Europa.