En los últimos días un nuevo reto viralha corrido como la pólvora por las redes sociales. Pero esta vez, a diferencia de otros como el 'hot water challenge' (que consiste en lanzarse por encima una olla de agua hirviendo) o el reto de la canela, no se trata de algo absurdo ni peligroso.

Se trata del reto de la silla, más conocido como 'chair challenge'. Este desafío consiste en lo siguiente: hay que colocarse frente a una pared, dar tres pasos hacia atrás e inclinarse de tal manera que el cuerpo quede en un ángulo de 90 grados con la cabeza tocando la pared y la espalda recta. En ese momento hay que coger una silla con las dos manos, levantarla hasta tocar el pecho y después intentar erguirse.

Puede parecer algo sencillo, pero los cientos de vídeos que estos días han copado Instagram, TikTok o Twitter no lo dejan tan claro. Y es que para realizar correctamente este reto es necesario que lo hagan un hombre y una mujer. Porque lo curioso del 'chair challenge' es que, por norma general, sólo las mujeres pueden conseguirlo.

¿Cuándo surge el 'chair challenge'?

El problema de los retos virales es que muchas veces no se puede encontrar la fuente de los mismos o la razón por la que han empezado a propagarse por la Red. En el caso del reto de la silla, no se sabe con exactitud por qué ha desatado la locura en las redes sociales estos días, ni quién lo ha iniciado en la actualidad. Pero lo cierto es que no es nuevo.

En una capítulo de la serie 'Todo en familia' de la década de los setenta vemos como varios de los personajes intentan llevar a cabo este reto, consiguiéndolo únicamente las mujeres.

Además, un video publicado en YouTube en 2012 muestra a varios jóvenes haciendo algo parecido a este reto. Eso sí, en dos versiones distintas.

¿Por qué sólo las mujeres pueden superar este reto?

A través de su cuenta de Instagram el cardiólogo puertorriqueño Juan Rivera explicó el motivo por el que las mujeres tienen más facilidad para superar este reto.

"El reto de la silla tiene una explicación médica", asegura Rivera. "Los hombres tienen el centro de gravedad en el abdomen y más masa corporal en esa zona, y a la hora de ponerse de pie se les hace mucho más difícil".

Esta teoría también la respalda el científico Jeremy Johnson. El estadounidense explicó al diario The Sun que el centro de gravedad de la mayoría de las mujeres está en la cadera o más abajo. "Por lo tanto, para la mayoría de las chicas, el centro de gravedad mientras están inclinadas sobre la silla está por encima de sus pies, mientras que para la mayoría de los chicos está por encima de la silla", explica Johnson.

Otra posible explicación la ha dado Brian Ford, profesor de la Universidad de Cambridge. El investigador aseguró al mismo medio británico que la razón por la que las mujeres lo consiguen está en los pies. Por norma general, el pie femenino es más pequeño que el masculino, por lo que al alejarse tres pasos de la pared, los hombres estarán a una distancia mayor que las mujeres y tendrán más problemas para levantar la silla.