La profesora de religión Resurrección Galera, que no fue renovada en 2001 en un colegio público por decisión del Obispado de Almería tras casarse con un divorciado, se ha reincorporado hoy al en el CEIP Ferrer Guardia en cumplimiento de la sentencia dictada en 2016 por el Tribunal Supremo (TS).

El TS ordenó la readmisión de la docente tras anular en su sentencia un fallo previo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) y declarar que la falta de llamamiento de la docente para el curso escolar 2012-2013 es constitutiva de un "despido nulo por violación de derechos fundamentes".

A pesar de ello, no fue hasta el pasado mes de julio cuando el Ministerio de Educación trasladó al Juzgado de lo Social 1 de Almería que Galera se incorporaría este curso en el citado centro docente del barrio de La Cañada de San Urbano de la capital almeriense.

La delegada territorial de Educación de la Junta en Almería, Francisca Fernández, ha dado esta mañana en declaraciones a los medios la "bienvenida de nuevo a la plantilla docente" a la profesora, y ha recordado que la resolución judicial del TS reconoce su derecho a continuar siendo parte de la plantilla docente de religión.

Ha sostenido que la Consejería de Educación "siempre ha estado" a disposición de lo que determinasen el Ministerio y el Obispado y que por parte del Gobierno andaluz nunca ha existido "ningún problema" sino que, "al contrario", se ha "facilitado" la incorporación de Galera a lo que es "ya una situación de pleno derecho".

La delegada además ha sentido la "situación producida durante todos estos años" pero ha reiterado que "la Consejería nada ha tenido que ver".

Cabe recordar que el Alto Tribunal condenó al Ministerio de Educación, a la Consejería de Educación y al Obispado de Almería a "readmitirla y pagarle los salarios de tramitación que se devenguen hasta que la readmisión tenga lugar".

Galera trabajó como profesora de religión y moral católica en dos colegios públicos desde el curso 1994/95 hasta el 2000/01, prestando sus servicios para el Ministerio de Educación, a propuesta del Obispado de la Diócesis de Almería.

En septiembre del 2000 contrajo matrimonio con un divorciado, por lo que el Obispado la excluyó de la relación de profesores propuestos para el curso 2001/2002, hecho que fue denunciado en los tribunales por Galera.