En la mañana de este lunes, según fuentes policiales, se ha encontrado sin vida en el municipio de La Orotava, en una vivienda de la calle Cruz de los Martillos, a un matrimonio y sus dos hijas, de 3 y 6 años.

El hombre que ha aparecido muerto junto a su familia, al norte de Tenerife, ha sido hallado ahorcado con una cuerda, han informado a Efe fuentes de la investigación.

Los primeros indicios de la Guardia Civil apuntan que los cadáveres del matrimonio y sus dos hijas de corta edad no tienen signos violentos, han informado a EFE fuentes de la investigación.

Según las primeras hipótesis, el padre de familia, de 45 años de edad, habría asesinado a su mujer de 32 años y sus dos hijas, acabando posteriormente con su vida. Este hecho apuntaría a un nuevo caso de violencia machista y parricidio.

A estas horas no se puede realizar ninguna confirmación sobre cómo han ocurrido los incidentes, aunque el alcalde de La Orotava, Francisco Linares, ha informado sobre la existencia de una nota encontrada en el domicilio, aunque aún no puede confirmarse su autoría ni desvelarse el contenido de la misma.

De igual manera, los vecinos hablaban de disparos en dicho domicilio, a lo que Linares ha descartado en el incidente la presencia de algún tipo de arma de fuego. Además, el alcalde confirma que no hay denuncias previas por parte de la mujer.

Según ha informado Narciso Pérez, concejal de Seguridad de La Orotava, la alerta llegó a las 12:30 de este lunes a la Guardia Civil, quien fue informada de que en el número 30 de la calle Cruz de Los Martillos aparecieron cuatro cuerpos sin vida de la misma familia, un matrimonio y sus hijas menores. La zona ha sido acordonada por la Guardia Civil y la Policía Local.

El concejal subrayó que el hecho ha causado una gran conmoción en todo el municipio. Además, personas que habitan cerca del lugar de los hechos se han trasladado a la calle del incidente a la espera de más información de lo sucedido. Algunos vecinos están sentados en la acera atentos a cualquier novedad, otros miran desde el balcón y todos coinciden en que en esta zona nunca se había vivido nada igual. Argumentan que la familia era muy tranquila y que nunca se habían oído peleas.

En este momento la jueza y la policia judicial está dentro del domicilio estudiando el caso.