Las familias españolas tiran cada año 604 millones de kilos de alimentos, una cifra que supone una reducción del 4 % respecto a 2015, cuando el Gobierno puso en marcha la estrategia "Más Alimento, Menos Desperdicio".

La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha presentado hoy la memoria de actividades de la primera fase de este programa, un período durante el que los españoles han "cumplido", sobre todo a la hora de reducir la cantidad de comida que se despilfarra en los hogares.

Ha destacado el desarrollo del Panel de Cuantificación del Desperdicio Alimentario en los hogares, un "método fiable de medición pionero en Europa", así como el impulso dado a iniciativas legislativas para impulsar la donación tanto en el Congreso de los Diputados como en el Senado.

La ministra ha insistido en el compromiso de la FAO, la Comisión Europea y el Gobierno de España en frenar este "grave problema para la humanidad" que supone que cada año se pierda un tercio de los alimentos que se producen, mientras 800 millones de personas pasan hambre.

Ha abundado en el coste económico de esta realidad y también en el ecológico, pues de esta manera se despilfarra una cuarta parte del agua que consume la producción agrícola y se generan importantes gases de efecto invernadero. Además, ha recordado que España es el séptimo país europeo donde se tira más comida.

Por su parte, el director de Industria Alimentaria, Fernando Burgaz, ha detallado los logros conseguidos desde 2015, como el desarrollo de estudios de cuantificación del desperdicio alimentario, las guías prácticas sectoriales o el apoyo a las acciones de las empresa.

En este tiempo se han elaborado informes como el primer "Estudio sobre el desperdicio alimentario", que en 2013 cifraba en un 65 % la cifra de españoles que decía conocer la diferencia entre fecha de caducidad y la de consumo preferente.

También se ha investigado sobre las pérdidas que se producen en la producción primaria y en la industria. Así, se calcula que en el campo se pierde el 26 % del total de los alimentos desperdiciados, mientras que en la industria las principales causas de pérdidas son la gestión de compra, de la producción y la gestión de reservas.

También se han examinado las pérdidas en la restauración colectiva y organizada -donde la bollería y las frutas supone el 60 % de lo que se desperdicia- o el despilfarro en los comedores de la Administración Pública.

De cara a la segunda fase del programa "Más Alimento, Menos Desperdicio", desde el Ministerio han explicado que se profundizará en los últimos eslabones de la cadena -restauración, distribución y hogares-, ya que éstos concentran el 60 % del desperdicio.

Entre la novedades, ha destacado la evaluación del impacto ambiental generado por el desperdicio y el impulso de una guía nacional para facilitar la donación de alimentos.

Ocho son las áreas de actuación de esta nueva estrategia: la generación de conocimiento, formación y sensibilización, fomento de buenas prácticas, colaboración con otros agentes, acuerdos sectoriales, aspectos normativos, investigación e innovación y desperdicio alimentario y cambio climático.

En materia de difusión, ha subrayado la implantación de la Semana Nacional contra el desperdicio alimentario y nuevas campañas de sensibilización en los colegios, mientras que en el marco de los acuerdos sectoriales se trabajará con la distribución, la restauración y las escuelas de cocina, ha apuntado Burgaz.

La Estrategia "Más Alimento, Menos Desperdicio" está liderada por el Ministerio, pero cuenta con un comité de Seguimiento con más de 60 miembros para avanzar entre todos en las soluciones que permitan poner fin al desperdicio alimentario.