Investigadores de la universidad Carnegie Mellon de Pittsburgh, EEUU, han confirmado que la cara es la tarjeta de presentación de una persona. Según tus rasgos, el otro te percibe de una forma u otra nada más conocerte.

Sin embargo, los investigadores del estudio recuerdan que se trata de 'primeras impresiones', ya que la cara no tiene ninguna correlación directa con nuestra personalidad. Por ejemplo, su estudio indica que que personas con rasgos femeninos o sonrisa crónica son percibidas siempre como honradas.

Siempre nos fijamos primero en la parte izquierda de la cara del otro, así como en el triángulo entre los ojos y la boca. Estos factores son los que determinan la 'primera impresión'.

En sólo 100 milisegundos evalúas rasgos como la mandíbula, la nariz, la boca o los pómulos, que determinan las primeras sensaciones sobre un desconocido, según han desvelado investigadores de la universidad de York, Reino Unido. Por ello, los expertos recomiendan elegir bien las fotos que se suben a las redes sociales como LinkedIn, donde pueden surgir oportunidades laborales... a primera vista.

Así conseguirás que te recuerden

Expertos como el psicólogo de la universidad de Bamberg -Alemania-, Claus-Christian Carbon, destacan que tener algún rasgo diferente cerca del eje central de la cara hace que la gente nos recuerde mejor. ¿Un ejemplo? El lunar que tiene sobre la boca la modelo Cindy Crawford.

Así, para contrarrestar el peso de la cara en la decisión de la gente los investigadores recomiendan, en reuniones cara a cara, aportar, nada más conocernos, el mayor número de datos posibles sobre nuestra vida, éxitos, forma de trabajar.... En la medida que el otro tenga más información menos importancia se le dará a su cara.

Forma de la cara

Para saber a qué categoría pertenece tu rostro, ponte delante de un espejo y traza en un papel las líneas que lo componen. Una cara redonda indicaría que la persona tiene mucha iniciativa y una gran capacidad de adaptación. Las caras ovaladas nos hablan de individuos soñadores y creativos. En cambio, las caras cuadradas son propias de personas decididas y optimistas, con capacidad para liderar. Las caras en forma de triángulo apuntan a que el sujeto es muy intuitivo y goza de una gran agilidad mental… pero las personas con más confianza en sí mismas serían aquellas con una cara rectangular.

Si en tu cara predominan la frente y los ojos, es probable que seas una persona racional y autocrítica, con cierta tendencia a obsesionarte con los detalles. En cambio, si lo más llamativo es la nariz, tu rostro nos estaría hablando de alguien apasionado y con talento para los negocios, a pesar de tu impulsividad. Cuando predominan los labios, estaríamos ante un sujeto sensual, pero demasiado ingenuo y con poca capacidad crítica.

Labios

Las personas con labios carnosos son muy organizadas y dan mucha más importancia a la familia y a los amigos que a sí mismas. Por su parte, los labios finos serían de gente más independiente y que buscaría su propio espacio. Son, además, las personas que mejor saben expresarse.

Frente

Cuando la frente es redondeada, estamos ante alguien en quien predomina la creatividad. Las frentes planas apuntan a sujetos más reflexivos, y las anchas son habituales entre las personas más inteligentes, al igual que la presencia de líneas horizontales… Pero ojo a las líneas verticales en la frente: cuantas más haya, más nos hablarán de un individuo violento y conflictivo.

Cejas

Las cejas pobladas nos hablan de personas apasionadas, inteligentes, con fuerza de voluntad y mucha autoconfianza; las poco pobladas nos ponen sobre la pista de una persona con menos fortaleza interior. Cuanto más juntas se encuentren, más celoso y melancólico será el individuo.

Se dice que las personas con ojos grandes tienen buenas habilidades comunicativas, mientras que las que tienen ojos pequeños son más inteligentes, pero también más reservadas a la hora de confiar en alguien.

Nariz

Los sujetos con narices prominentes son más sensibles y perfeccionistas; en cambio, los que tienen una nariz pequeña tienden más a la eficacia, sin preocuparse por los pequeños detalles. Las narices largas reflejan determinación, mientras que las aguileñas nos hablan de personas sensuales.

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