La organización no gubernamental Manos Unidas ha obtenido hoy el premio Príncipe de Asturias de la Concordia 2010 al que optaban 34 candidaturas de diecinueve países.

Manos Unidas, la asociación de la Iglesia Católica en España para la ayuda, promoción y desarrollo del Tercer Mundo que el pasado año celebró su 50 aniversario, llegó a las últimas votaciones del jurado junto a la Organización Internacional del Trabajo y a la dirigente de la oposición democrática birmana Daw Ang San Suu Kyi, que obtuvo el premio Nobel de la Paz en 1991.

La candidatura, propuesta por el secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Juan Antonio Martínez Camino, recibió 6.300 apoyos, entre los que figuran anteriores galardonados como Teresa Berganza, el padre Ángel García, Eduardo García de Enterría, Somaly Mam, Miguel Indurain y Federico García Moliner, así como misioneros, obispos y superiores de comunidades religiosas de todo el mundo.

El presidente del Principado de Asturias y del jurado, Vicente Álvarez Areces, ha leído el acta en el que se destaca que a lo largo de su medio siglo de existencia, Manos Unidas "viene prestando su apoyo generoso y entregado a la lucha contra la pobreza y en favor de la educación para el desarrollo en más de sesenta países".

El jurado ha valorado además "su contribución en los últimos años en proyectos específicos cuya meta es combatir el hambre y reducir la mortalidad materna en el mundo".

El premio de la Concordia, dotado con 50.000 euros, una escultura creada por Joan Miró para estos galardones, diploma e insignia acreditativos, es el último de los ocho Premios Príncipe de Asturias que se conceden este año, en el que cumplen su trigésima edición.